La sombra de Di Stéfano es alargada. En el juego, en la ambición y en la fuerza. Lástima que Cristiano Ronaldo no traduzca en palabras la herencia del legendario Don Alfredo.

La sombra de Di Stéfano es alargada. En el juego, en la ambición y en la fuerza. Lástima que Cristiano Ronaldo no traduzca en palabras la herencia del legendario Don Alfredo.
La celebración del Madrid tuvo como protagonista a quien no lo fue durante el partido, aunque sí al final del mismo: Cristiano Ronaldo. Y no hay duda: el veredicto le es favorable.
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