No habrá pasillo el sábado en el Clásico. No deja de ser el reflejo de la obsesión que hay siempre con el Madrid al otro lado del Puente Aéreo.

PorTomás Roncero

Cayeron cuatro goles, pero pudieron ser legión de no ser por los mil palos. Guilherme marcó a Messi con la mirada, y así la vida es fácil para el Barça.

PorLuis de la Cruz

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