El cambio en el rictus de Zidane es normal porque, aunque dijo que nunca iba a estar preocupado, la situación no invita al optimismo.

El cambio en el rictus de Zidane es normal porque, aunque dijo que nunca iba a estar preocupado, la situación no invita al optimismo.
Seguramente por la cabeza del crack malagueño se esté pasando la posibilidad de partir como suplente ante el PSG en la Champions.
Si el balón está por detrás de Unal, sería fuera de juego. En algunas tomas de televisión parece que no lo está. Tras cinco repeticiones todavía no lo tengo claro.
Villarreal y Sevilla acechan. Por favor, acaben el campeonato con dignidad y aseguren una plaza en Champions como sea, señores.
Nunca hasta ayer había ganado el Villarreal en el Bernabéu, y lo consiguió con un gol sobre la hora, una salida relampagueante aprovechando el rechace del ...
Página135