¿Cuándo es la próxima pelea de Canelo Álvarez?

Canelo Álvarez decidió salir el sábado al ring con una versión del clásico 'Sigo siendo el rey' de Vicente Fernández (la cantó, en directo, Fernando Olvera, líder de Maná). Fue una declaración de intenciones que cumplió en el ring y festejó poniéndose una corona. Es el único monarca del supermedio. Noqueó en el undécimo asalto a Caleb Plant en Las Vegas y se hizo con los cuatro cinturones (WBC, WBA, IBF y WBO) de la división. Es el undécimo púgil en la historia que logra ese hito y el primero latino. Una línea de oro más para el palmarés del mexicano.

Canelo demostró de nuevo en el combate que los planes que diseña junto con Eddy Reynoso son infalibles. Lo ejecutó a la perfección en un combate en el que no acabó de lucir como muchos esperaban. Plant es un buen luchador y salió a hacer un pleito trabado que impedía que alguno de los dos brillase demasiado. Álvarez se dedicó a cerrar espacios, ir sumando golpes de poder y esperar. Lo hizo bien, aunque en su contra hay que decir que en determinados momentos se le vio un poco desquiciado por noquear (iba ganando con claridad en las cartulinas) y eso hizo que encajase golpes innecesarios. Pese a ello, hizo caso a su esquina, bajó el ritmo y cuando encontró el hueco no falló. Con un crochet y un upper destrozó al estadounidense y armó la fiesta entre los muchos mexicanos que había en Las Vegas.

La gesta de Canelo es muy grande. No solo por unificar una división, sino por la manera. En once meses ha peleado contra tres campeones invictos (Smith, Saunders y Plant) y ha realizado una defensa (Yildirim). No hay duda sobre que es el mejor boxeador del momento y esto le sitúa muy arriba en la historia del noble arte.

Durante el último año, el reto de Canelo hacía que la pregunta sobre su futuro fuese clara. Ahora, una vez logrado el objetivo de unificar un peso, ¿qué es lo siguiente? De momento, el mexicano lo dejó bien claro: "Ahora necesito un descanso", espetó en el ring y lo reiteró en sala de prensa. Es lógico, cuatro combates, tres de ellos de gran entidad, en once meses es mucho y el cuerpo y la mente necesitan desconexión. De hecho, Álvarez dio pistas. No volverá a boxear hasta mayo y en enero se sentará con su entrenador y mánager, Eddy Reynoso, para elegir un nuevo camino. También afirmó haber estado contento con Premier Boxing (ganará alrededor de 140 millones). Golovkin, Benavidez y Beterbiev, principales futuribles.