Cambio de nombre y sede se traduce en malos resultados
En la historia de la Liga MX, 12 equipos que cambiaron en la Primera División no tuvieron el éxito inmediato y sólo tres lograron presentación positiva.
La historia no prevé un buen futuro para el novel equipo de FC Juárez en la Primera División del futbol mexicano. La gran mayoría de los cambios de sede han resultado un fracaso en su presentación: un total de 12 equipos tuvieron malos resultados en su primer torneo, mientras que sólo tres escuadras nuevas sí tuvieron cierto éxito.
Así como se dio esta vez con la transformación de los Lobos BUAP a los Bravos de Ciudad Juárez, a lo largo de la historia del balompié azteca ha habido múltiples cambios de nombre y sede por parte de sus equipos en Primera División.
Diferentes clubes cambiaron de identidad y dejaron huérfana a toda una afición que coreaba su mote y el de sus ídolos. Así se dieron diversos casos en los cuales un equipo, ya en la División de honor, cambió de lugar y de nombre.
Las franquicias que cambiaron en torneos cortos
Para el Apertura 2013 se dieron dos de estos movimientos: Jaguares de Chiapas se convierte en Querétaro y San Luis en Chiapas FC. El equipo queretano llega hasta los cuartos de final donde es eliminado por Santos Laguna por marcador global de 6-3, mientras que el nuevo Chiapas FC termina en el noveno lugar con 25 puntos en 17 jornadas, y se queda a tres goles de acceder a la liguilla, ya que Tigres tenía una mejor diferencia de goleo.
Al final de un espectacular torneo en el cual La Piedad terminó como líder general, pero fue eliminado por el América en los cuartos de final, la franquicia fue vendida a Querétaro. En su primer torneo de este nuevo equipo, el Apertura 2003, concluyó en la última posición general con sólo 7 puntos en 19 partidos.
El peculiar equipo de los Colibríes de Morelos, surgido de la mudanza del Atlético Celaya, en su primer y único certamen en el máximo circuito (Clausura 2003) terminó en la decimotercera posición general con 23 puntos en 19 partidos jugados. Además, el equipo morelense perdió la categoría.
Casos de fracaso en cambios de nombre y sede de equipos
Los Jaguares de Chiapas acabaron en el penúltimo lugar general en su torneo de debut, el Apertura 2002, cuando el Veracruz, que un torneo antes había absorbido la franquicia de Irapuato, fue transformado en el equipo chiapaneco.
Veracruz culmina en la decimoprimera posición en el Verano 2002, cuando se dio el regreso del futbol al Puerto Jarocho con la mudanza del Irapuato. Los nuevos Tiburones Rojos hicieron 24 unidades en 18 jornadas.
Los torneos largos tuvieron casos similares
En medio de la temporada 1994-95 el Tampico Madero se mudó a Querétaro debido a sus serios problemas financieros. La segunda parte de la campaña se juega con un híbrido de nombre TM Gallos Blancos que terminó descendiendo de categoría con 23 puntos en 36 jornadas que dejaron al equipo en el fondo de la tabla general.
Querétaro FC tuvo su primera temporada en la 1990-1991, después de que José Antonio García y Javier Vázquez compran al Tampico Madero. El año del debut no fue nada bueno para el cuadro queretano que terminó en la decimoctava plaza con 30 puntos en 38 partidos jugados.
En la temporada 1988-89 se estrenaron dos equipos gracias a sus respectivas compras de franquicia. Nació el Santos Laguna tras adquirir al Ángeles de Puebla, y en su año de debut terminaron en la decimoctava posición con 29 puntos en 38 fechas.
El otro equipo que surgió fue el Correcaminos, luego de hacerse de la franquicia de Coyotes Neza. Los tamaulipecos culminaron la temporada 88-89 en la decimocuarta posición con 34 unidades en 38 jornadas.
Ángeles de Puebla terminó su primera temporada (1984-85) en la decimotercera posición con una cosecha de 35 puntos en 38 jornadas disputadas. La franquicia de Oaxtepec fue la desaparecida para crear al club poblano.
Casos de éxito en cambios de nombre y sede de equipos
Tampico Madero nació tras la compra de Atletas Campesinos, y terminó su primera temporada regular en Primera División, la 1982-83, en la decimocuarta posición general con 33 puntos obtenidos en 38 jornadas.
Coyotes Neza terminó en el quinto y último lugar del Grupo 4 en la temporada 1978-79 de la Primera División en México con un total de 30 puntos en 38 jornadas tras comprar la franquicia del Laguna.
Tampico llegó hasta la semifinal en la temporada 1977-78, que era su primera campaña en el máximo circuito tras haber adquirido la franquicia de San Luis.
Los Leones Negros de la Universidad de Guadalajara terminaron la temporada 1974-75 en el quinto lugar del Grupo 1, con 42 puntos en 38 jornadas. No pudieron acceder a la fase final del certamen y así terminó la historia del primer torneo del primer club que compró a una franquicia de Primera División para cambiarla de nombre y sede, que en este caso fue la del Club de Futbol Torreón.