¿Vale la pena comprar el coche más barato de México?

Hoy, en México, donde la inflación se siente en cada esquina, la idea de un coche “accesible” parece casi un mito. Pero, ojo, aún hay un par de contendientes que se resisten a entrar en la categoría de “impagable”.

Y dentro de esa categoría, se corona hay dos modelos que se colocan dentro de los 250,000 pesos, y dentro de ellos el rey de los precios bajos está el Renault Kwid. Pero por ese precio, ¿este pequeño vehículo realmente representa una compra inteligente o si es mejor seguir buscando?

Vamos a hablar claro sobre el Kwid. Este coche, que es bastante compacto, tiene lo suyo: su principal atractivo es, sin duda, el precio. Hoy por hoy, es el auto nuevo más barato que puedes encontrar en México, pues tiene un precio inicial de 217,000 pesos.

En cuanto al diseño, aunque es pequeño, intenta verse moderno, como una mini-SUV. No tiene grandes lujos, pero se defiende. Su motor es pequeño -66 caballos de fuerza., ideal para la ciudad. Y en carretera hay que olvidar de rebasar como si fuera un auto de carreras.

Si se trata de equipamiento, incluye lo esencial para el día a día: aire acondicionado, radio, y algunos elementos de seguridad que son obligatorios. No se puede esperar encontrar pantallas enormes ni asientos de lujo.

Con todo y su talla, el espacio interior es adecuado para personas solteras, parejas sin hijos, o como un segundo auto para la familia. La cajuela, considerando el tamaño del coche, tiene buen espacio.

En cuanto a seguridad es importante considerar este punto, pues aunque cuenta con los sistemas de seguridad obligatorios, no es el auto más seguro del mercado.

¿Es buena compra?

Aquí es donde debemos ser muy honestos. Comprar el Kwid (o cualquier coche muy económico) es una decisión que tiene mucho que ver con lo que se necesita y lo que se espera:

Si lo más importante es, definitivamente, el precio, el Kwid es la opción. No se va a encontrar nada más barato. Si lo que se busca es un coche únicamente para moverse en la ciudad, el Kwid está bien. Es fácil de manejar, de estacionar, y gasta poca gasolina (22 km/l combinado).

Si lo que se quiere es un coche con muchos extras, mayor seguridad y que corra mucho, el Kwid no es lo ideal. Hay coches más completos, pero cuestan más.

Si se tiene una familia grande o se viaja seguido por carretera, entonces el Kwid no es el ideal. Lo mejor es buscar algo más grande y con más potencia. Si se piensa en él como una inversión a futuro, se debe saber que los coches muy baratos suelen perder su valor más rápido.

Entonces, ¿conviene comprarlo? La respuesta es un gran “depende”. Si se tiene claro lo que ofrece y se adapta al presupuesto y al cómo se vive, puede ser. Pero si se busca algo superior, hay que invertir más dinero.