Nicolás Sosa: gamer brillante; mal refuerzo para León
El delantero uruguayo será el sacrificado para liberar la plaza de extranjero que ocupará el colombiano Omar Fernández en los Panzas Verdes
El uruguayo Nicolás Sosa se irá del León con la credencial de haber sido un excelente gamer pero una mala decisión para reforzar al ataque esmeralda en el futbol de verdad.
Con Sosa en el control, León se proclamó campeón de la primera edición de la eLIGA MX, la versión virtual del torneo mexicano creada a mediados de 2020 para mitigar los estragos causados por la pandemia de COVID-19.
El uruguayo arrasó en la eLIGA y ganó los 20 partidos que disputó (17 fase regular y 3 de liguilla), además de que anotó un total 54 goles para ganarse el mote de "Nickiller" y llevar a los Panzas Verdes a la conquista de este título virtual.
Sin embargo, en el futbol real, la situación de Sosa fue muy diferente y no fue, ni de cerca, el refuerzo que la directiva, encabezada por Jesús Martínez, esperaba.
Desde su llegada al León en 2019, procedente del Racing de Uruguay, Nicolás participó en tan solo 22 partidos, registrando 801 minutos de juego y ningún gol.
Es más, la crisis de gol por la que atraviesa Sosa va más allá: la última vez que anotó fue el 16 de noviembre del 2019, en un partido de su entonces club, el Racing, frente a Cerro Largo, en la liga uruguaya.
En total, Nickiller lleva un año y siete meses sin anotar gol en el futbol real.
El atacante charrúa firmó un contrato con los Panzas Verdes al que le quedan dos años de vigencia, pero ante la llegada del colombiano Omar Fernández al equipo, el conjunto guanajuatense tiene la necesidad de liberar una plaza de extranjero. Sosa será el sacrificado.
Por el momento, el delantero realizó el viaje con León a su pretemporada, en Hidalgo, y se hizo los exámenes médicos de rigor, pero la realidad es que no tiene cabida en el equipo dirigido por Ariel Holán y ya se le busca acomodo en otro club, ya sea de México o e extranjero.