Consejos para manejar de forma segura tras el confinamiento
Hay que tomar ciertas precauciones, luego que se dejó de conducir o se hizo con menos frecuencia.
Ahora que las personas están volviendo a la “normalidad” tras el confinamiento de la pandemia del coronavirus, muchas actividades que se habían dejado de hacer o que fueron realizadas esporádicamente, serán como antes.
Una de esas actividades que se redujo de manera drástica por la contingencia sanitaria fue la conducción. Si bien dice la frase: “lo que bien se aprende jamás se olvida”; el hecho de no manejo por semanas o hacerlo en distancias cortas durante este periodo, probablemente hizo que se perdiera la costumbre.
Ante este regreso al volante, es importante mantener ciertas precauciones como: mayores márgenes de seguridad, ejercer una conducción defensiva, comprender que se pasará más tiempo conduciendo y que el cansancio se hará presente antes de lo acostumbrado.
Considerando que se tendrá que manejar a los ritmos que antes, pero después de varias semanas de pausa, donde solo se utilizó el automóvil para lo necesario es importante seguir estos puntos:
Confianza y tranquilidad
Es normal que cualquier persona se siente un poco extraña y torpe la primera vez que conduce después de haber pasado semanas sin hacerlo. Tanto el pisar el acelerador como el freno, no se calcula con la misma rapidez y precisión, lo mismo sucede con las distancias con otros autos y elementos del camino.
Lo que también sucede es que no se circula con la misma soltura entre el tráfico y se pierde algo de destreza con el volante, los pedales y otros mandos del automóvil. Ante esta falta de práctica, hay que volver a retomar la confianza al volante. Es un hecho con esta pausa no ha hecho que se olvide manejar, solo se necesita un periodo de adaptación para volver a sentir al volante como antes. A medida que pase el tiempo y los kilómetros, se volverá a desarrollar todos los automatismos implicados en la conducción.
Mayores niveles de seguridad
En lo que se retoma la confianza, es importante aumentar los márgenes de seguridad, para tener más tiempo y capacidad de reacción ante las diferentes situaciones que se presenten. Lo ideal es dejar unos metros más de distancia de seguridad con el vehículo de adelante, anticipar el frenado antes de una curva y no manejar con exceso de velocidad.
Conducción defensiva
Manejar a la defensiva no es conducir “aventando” el automóvil, sino implica poner toda la atención, mirando y evaluando constantemente todo lo que nos rodea para detectar posibles amenazas y estar prevenido frente a ellas. Asimismo, la conducción defensiva se trata de actuar previendo los posibles errores o despistes de los demás.