Rajai Davis, el Acerero que casi alarga la maldición de la cabra
Los Acereros de Monclova reforzaron su ofensiva con uno de los hombres más veloces de la década pasada y un hombre con un papel fundamental en el legendario juego 7 de la Serie Mundial.
La Liga Mexicana de Béisbol ha estado reuniendo a figuras para mejorar el nivel de competencia y atraer a los aficionados al parque de pelota. Esto es particularmente cierto en el caso de los Acereros de Monclova, quienes ya contaban con Erick Aybar y ahora también tendrán los servicios de Bartolo Colón y Rajai Davis, este último, uno de los protagonistas en la legendaria Serie Mundial de 2016.
En 2016, Chicago se enfrentó a Cleveland en el Clásico de Otoño, un duelo entre las dos novenas con el mayor tiempo sin conquistar una corona de Grandes Ligas. En el equipo de los Indians aparecía el nombre de Rajai Davis, un jardinero de 35 años con 10 años de experiencia en la MLB y que había firmado con el equipo tras con las novenas de Pirates, Giants, Athletics, Blue Jays y Tigers.
Durante la campaña del 2016, Davis destacó con 43 bases robadas, la cantidad más alta de la Liga Americana, así como 12 cuadrangulares, 48 carreras producidas y 113 imparables. En la postemporada lució bastante apagado durante la Serie Divisional y la Serie de Campeonato, con cero hits, una carrera anotada, otra remolcada y un robo de base.
Sin embargo, Davis se mantuvo en el lineup para la Serie Mundial, con una destacada actuación en el séptimo y definitivo en el Progressive Field. Fue en la fatídica séptima cuando Rajai se presentó en la caja de bateo con un marcador de 6-4 a favor de los Cubs. El bateador derecho encontró un lanzamiento en su zona, vio volar la pelota por encima de la barda y en un instante igualó el juego, dio pie a un juego completamente nuevo, derrumbó al cubano Aroldis Chapman y despertó a todos los fantasmas en la historia de Chicago.
El resto de la historia es bien conocida. El partido se fue de manera dramática a extra innings, Ben Zobrist y Miguel Montero rompieron el empate, Kris Bryant tomó la bola en tercera, la entregó a Rizzo y los Cubs pusieron fin a una maldición de 71 años y levantaron su primera Serie Mundial en 108 años.
Sin embargo, Davis tuvo un último momento de protagonismo en la parte baja del décimo episodio con un imparable que recortó la distancia en el marcador, insuficiente para el instante en que cayó el out número 30.
Rajai se presentará en la pelota azteca con 415 bases robadas robadas en Grandes Ligas y 14 años de anécdotas en la gran carpa.