Guzmán es el 10° mexicano con póker en los torneos cortos
Un mexicano no marcaba cuatro tantos en un partido de Liga desde 2015, cuando Javier Orozco se destapó ante Gallos.
Uno, dos, tres cuatro. Por primera vez en el Apertura 2018 un futbolista logró marcar cuatro tantos en un mismo partido, y extrañamente lo logró un mexicano.
Lo conseguido por Víctor Guzmán, autor de cuatro dianas en la goleada de Pachuca sobre Necaxa (6-2), representa la ocasión número 25 en la que se registra un póker goleador en la era de los torneos cortos, aunque sólo en 10 de esas ocasiones la hazaña la lograron jugadores nacidos en México.
El más reciente futbolista mexicano que firmó una actuación con cuatro goles en Liga MX había sido Javier “Chuletita” Orozco que en plena final del Clausura 2015 hizo cuatro de los cinco goles con los que Santos Laguna sentenció aquella serie por el título frente al Querétaro.
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En el Hidalgo el único jugador mexicano que había marcado cuatro goles en un mismo juego de Liga había sido Alberto García Aspe, quien el 25 de febrero de 2001 le marcó al Pachuca esa cifra cuando jugaba en el Puebla.
En la lista de los 10 mexicanos que han marcado cuatro goles en un partido de Liga MX desde la instauración de los torneos cortos aparecen nombres como los de Jared Borgetti, Luis García, Jesús Olalde y Oribe Peralta, además de otros no tan connotados o de posiciones más retrasadas, como en el extraño caso de Miguel Layún, autor con América de cuatro tantos frente a Santos Laguna en La Comarca.
Curiosamente este año es la segunda vez que se registra un hecho estadístico similar y ambas las registraron futbolistas del Pachuca, ya que en el Clausura pasado fue el argentino Sebastián “Tucu” Palacios, también con Pachuca, el que hizo cuatro tantos frente al Puebla en el Estadio Cuauhtémoc.
En la historia de la Liga, en su era profesional, el jugador mexicano que más goles anotó en un partido fue Martín Cuburu, que con el Moctezuma le hizo seis tantos al Monterrey, el 26 de agosto de 1946.