Placido Galindo, primer expulsado en un Mundial
El futbolista peruano entró en la historia de la Copa del Mundo de manera negativa al convertirse en el primer jugador que es expulsado en la justa.
Era 1930 y se celebraba en Uruguay la primera Copa del Mundo de fútbol. El futbolista peruano, Placido Galindo, entraría en la historia de la justa, aunque de manera negativa. El capitán de los incas sería el primer futbolista expulsado, lo extraño es que debido a que en ese entonces no existían las tarjetas, simplemente dejó el terreno por orden del silbante.
Los peruanos se encontraban encuadrados en el Grupo 3 junto con el anfitrión Uruguay y Rumania. El 14 de julio de 1930, los incas debutaron enfrentándose a su similar de Rumania en el Estadio Pocitos de Montevideo. Apenas al primer minuto, los europeos ya estaban arriba en el marcador con el gol de Adalbert Desu.
Debido a ello, los sudamericanos comenzaron a entrar en desesperación e hicieron del partido un juego brusco con muchas patadas y poco juego. A los 70 minutos del encuentro, el capitán de Perú le soltó un golpe a un rival y por ello el silbante decidió echarlo del campo. Sin embargo, para ese entonces y como ya habíamos comentado arriba, las tarjetas todavía no se habían implementado.
Ante ello, el silbante chileno Alberto Warnken, simplemente pitó la falta y le pidió al peruano que abandonara el campo, con lo que Galindo se convirtió de manera oficial en el primer futbolista que es expulsado en la historia de la justa.
Al final, el encuentro terminaría con una victoria para los rumanos 3-1, aprovechando que jugaron los últimos 20 minutos con un hombre de más. Stanciu y Kovacs marcaron en los minutos finales para sellar el triunfo de los entonces dirigidos por Costel Radulescu.
En ese entonces, las reglas no se aplicaban como ahora y por ello el capitán de los incas pudo disputar el segundo encuentro ante Uruguay, donde los incas se despidieron sin puntos al caer por la mínima ante los charrúas.
Triste Asistencia
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Como si la histórica expulsión de Galindo no fuera suficiente, el partido también es parte de los récords del Mundial de Fútbol, nuevamente por un tema negativo. Fue el cotejo con menor asistencia en la historia de la justa.
De acuerdo con la FIFA, el registro oficial de aficionados que presenciaron el encuentro fue de 2 mil 459 personas, sin embargo, algunos testigos aseguran que esta cifra es errónea y en realidad no pasaron ni de 300 personas en el inmueble.