HISTORIAS DE LOS MUNDIALES | 24
Matthias Sindelar, la estrella austriaca que le hizo frente a la Alemania nazi
La leyenda del fútbol austriaco enfrentó los problemas políticos y sociales con el balón para poner su nombre en los libros de historia por siempre.
El deporte y la sociedad van de la mano. Los problemas que se viven día a día afectan, de manera directa o indirecta, lo que sucede dentro y fuera de la cancha. Matthias Sindelar es la representación más clara del caso. Un austriaco que luchó toda su vida por hacer frente a la opresión de la Alemania nazi situación que lo llevó a ser una leyenda del fútbol mundial.
Los conflictos bélicos en Europa a mediados del siglo pasado afectaron al desarrollo natural del fútbol. La incertidumbre por saber qué sucedería en un futuro colocaba a los países en una posición poco cómoda para actuar: ir o no a una Copa del Mundo podía definir su postura política.
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La anexión de Austria a Alemania (también conocida como anchsluss) provocó un cambio total en la mentalidad de Matthias Sindelar, la joya emergente del FK Austria Viena. El delantero tenía claro que no sería parte del equipo teutón que disputaría la Copa del Mundo de Francia 1938 debido a la opresión y ataques en contra de su nación por parte de aquellos que buscaban reclutarlo.
Pero la tensión entre Sindelar y la Alemania nazi no era novedad. En un partido “por la paz” entre ambas naciones, el llamado ‘Mozart del fútbol’ saltó al campo sin la chispa que lo caracterizaba. Las anécdotas relatan que el joven estaba errático, y él casi no fallaba sus oportunidades. Algo andaba mal con el ariete.
Para el segundo tiempo la situación cambió por completo. Sindelar se quitó de encima las órdenes que parecían indicarle que errara todas sus oportunidades y dejó en claro su calidad. Marcó un tanto y participó en el segundo definitivo para la victoria de Austria. Una victoria dentro de la cancha que festejó frente a decenas de altos mandatarios nazis.
A partir de ese momento, el jugador de origen judío se desentendió por completo de la portería. Sin la ayuda de Sindelar en el campeonato por su rechazo al combinado nacional, la Selección de Alemania se quedó en octavos de final al no poder superar a Suiza en la tanda de penales (4-2). Su postura era firme y clara: ni dentro ni fuera de la cancha iba a ceder ante la presión rival.
Sindelar participó en una Copa del Mundo: Italia 1934. El goleador austriaco logró un histórico cuarto lugar con su país, pero ese no sería su mayor logro. Ese festejo frente al palco de Hitler en el partido “por la paz” fue uno de sus momentos más destacados. Su calidad en el terreno era innegable, pero Matthias utilizó la plataforma del fútbol para algo más importante: hacer frente al Tercer Reich a nombre de todos sus compatriotas.
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El delantero falleció al poco tiempo del término del Mundial de Francia. Gustav Hartmann, un amigo cercano de Sindelar, lo visitó un 23 de enero de 1939, pero notó un olor extraño. Forzó la entrada para entrar a la casa de Matthias; sin embargo, ya era demasiado tarde: el futbolista había muerto a causa de inhalar monóxido de carbono por una fuga de gas.