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BULLS 112-WARRIORS 119

Mirotic (24+6) se rinde a los Curry y Thompson: ¡13 triples!

Los Warriors igualan su mejor racha de victorias a domicilio (14) y están a tres del récord histórico de los Lakers. 0-4 en seis noches en el Este.

Mirotic (24+6) se rinde a los Curry y Thompson: ¡13 triples!
TANNEN MAURYEFE

Era el típico partido trampa para los Warriors, cuyas derrotas tienen a estas alturas un patrón ya muy claro. Las llamadas derrotas de calendario. Partidos de gestión de descansos y serios indicios de déficit de atención. En una gira muy dura de cinco partidos en nueve días, jugaban el cuarto en seis. Después de ganar tres muy señalados en Miwaukee, Toronto (en back to back) y Cleveland, y antes de volver a jugar en Houston, los Warriors pasaban como quien no quería la cosa por Chicago. Pero ganaron (112-119): cuatro de cuatro en la gira en ruta hacia los Rockets y catorce victorias seguidas a domicilio. La cifra iguala su mejor marca (en el año del 73-9) y les pone en la tercera histórica, a dos de las 16 de los Lakers 1971-72. Si los Warriors quieren seguir acaparando todos los récords habidos y por haber, les queda ganar en Houston y después en Utah y Sacramento. Así tendrían las 17.

Para colmo, los Warriors jugaron sin Iguodala ni Draymond Green, que sigue cuidando con mimo el hombro que le ha dado problemas toda la temporada. Y en la primera jugada del partido, Jordan Bell (el drafteado con el pick comprado por 3,5 millones a los Bulls) trató de taponar un mate de Robin Lopez y cayó fulminado con lo que parecía una lesión muy fea de tobillo (y que podría no serlo tanto según una primera observación). A eso hay que sumarle que los Warriors se dejaron la defensa en el vestuario y encajaron 40 puntos en el primer cuarto (40-38) y 66 al descanso (66-63) a manos de estos inesperadamente vitales Bulls en los que Lopez y Mirotic sumaban 12 puntos por cabeza. El español (cualquier partido puede ser el último en los Bulls) entró en el partido con 12 puntos sin fallo en el primer cuarto y terminó con 24, 6 rebotes, 3 asistencias y 3 robos.

Por el camino, un 18-0 (de 28-38 a 46-38) que debió zumbar en los oídos de los Warriors durante el descanso: 12-32 en el tercer cuarto, con fuegos artificiales de Klay Thompson y Stephen Curry, que disparó con tres triples un parcial de vuelta de 0-19 en poco menos de 7 minutos (de 72-72 a 72-91). Los Bulls se pasaron casi siete minutos sin meter un solo punto. En ese tramo fallaron 12 tiros seguidos y perdieron de vista a un rival que es experto y destruir almas en los terceros cuartos: +238 ahora, el mejor total de cualquier equipo en cualquier cuarto en lo que va de temporada.

Desde atrás (78-95), los Bulls hicieron un último esfuerzo y llegaron, con Nwaba apretando a Curry en defensa y la ausencia de Green haciéndose visible en los primeros minutos del último cuarto (los de la segunda unidad), hasta un 102-107 a 2:55 del final y después de un mate en transición de Kris Dunn que acabó con el base por los suelos y con la boca ensangrentada después de aterrizar literalmente con la cara. Thompson y Kevin Durant (19+8+7) pusieron a buen recaudo la victoria y el, por ahora, 21-3 a domicilio. Y 37-9 total: una victoria en Houston (30-12 los Rockets ahora) el sábado dejaría el factor cancha en los playoffs del Oeste visto para sentencia.

Los Bulls, desde luego, mejoraron mucho la imagen con respecto al 143-94 que se llevaron en la Bahía, en los (lejanísimos) tiempos en los que parecían el gran aspirante al número 1 del draft (fue el 3-14 en ruta al 3-20 que precedió a la reacción). Markkanen se quedó en 11 puntos con un 2/7 en triples y LaVine falló en su tercer partido diez de los doce tiros que intentó (5 puntos). Pero la noche fue de los Splash Brothers, que en los duelos de la temporada le han metido a los Bulls 130 puntos y 22 triples. Esta vez, 38 puntos (season high) con un 7/13 desde la línea de tres para Klay y 30 con un 6/11 para Curry. Y el sábado, los Rockets. Y la opción de cerrar en 5-0 una gira temible y de dejar a tiro el récord de más victorias fuera. Uno de los pocos que todavía no tienen estos Warriors.