A los Astros siempre les quedará Justin Verlander y José Altuve
La valiente actuación del pitcher contra los Yankees y la productiva noche del venezolano con tres carreras impulsadas permite a Houston forzar el séptimo partido.
Aunque resulte recurrente porque ya hemos visitado este escenario al inicio de estas Series de Campeonato, los Houston Astros experimentaron un aumento exponencial de su autoestima cuando se hicieron con los servicios de Justin Verlander el pasado 31 de agosto, porque pensaban que era la pieza definitiva en ese puzle que aspira a ganar el título.
Tal afirmación no puede ser más cierta a raíz del segundo encuentro… salvo por el sexto que acaba de enfrentar a los texanos contra los New York Yankees.
Con un soberbio Justin Verlander sobre el montículo y un ataque que (al fin) despertó de la mano de José Altuve, los Houston Astros han sido capaces de derrotar por 7-1 a los Bombarderos del Bronx de cara a llevarnos al Nirvana del béisbol.
Sí, un séptimo partido.
Entre la espada y la pared
Con un equipo que ha sufrido como no se recuerda tras su visita al Bronx, en el que fueron desaborlados y diseccionados por los neoyorquinos, jamás hubo un momento de mayor necesidad para que Justin Verlander ofreciese esa imagen de jabato que suele reservarse para este tipo de situaciones.
A fin de cuentas, Verlander se acercaba al choque tras su magistral actuación en el segundo partido que completó con 124 envíos y con los Astros desmoralizados tras dilapidar su 2-0 en la serie y ver a su ‘Yankee Killer’ Dallas Keuchel salir prematuramente del quinto.
No obstante, esos detalles menores no eran de su interés. Su objetivo era conseguir cero tras cero contra los Yankees, como hace en esos encuentros eliminatorios en los que tenía una marca de 3-1 y ERA de 1.49 con Detroit Tigers.
Y lo hizo.
En una precisa actuación con Luis Severino como rival, Justin fue capaz de mantener a contrapié a los chicos del Bronx durante la mayor parte de una excelente actuación en la que se vio exigido en 99 envíos para llegar a las siete entradas.
Por su parte, el dominicano mantuvo a la defensiva y con una notable ansiedad a un grupo de bateadores que parecían otros alejados del Minute Maid Park y cuya postemporada no puede ser más distinta de lo que ha sido la campaña regular donde fueron la mejor ofensiva en la mayoría de las categorías importantes, incluidas carreras para ver cómo su productividad se reducía hasta las nueve carreras en cinco encuentros.
Una ventana de oportunidad
Sin embargo, con Velander y Severino batallando desde el montículo, una rápida pérdida de control del dominicano en la quinta entrada permitiría que tanto Alex Bregman como Evan Gattis alcanzasen primera vía bases por bolas antes de que Brian McCann finalizase su horrenda racha de 0 de 20 en playoffs con un rotundo doble y la primera carrera. Otro pasaporte a primera vía cuatro bolas y el out de Josh Reddick, dejaba las bases llenas para José Altuve.
El venezolano ha sido uno de los múltiples damnificados durante la visita al Bronx y ante su público, demostraba las razones por las que es uno de los mejores jugadores de la actualidad. Sin excederse, su single impulsaba un par de carreras para poner el 3-0 y que esa renta pareciese mayor en manos de Verlander.
Momento de máxima exigencia
Pero tampoco fue un camino de rosas para Justin, muy exigido en la sexta entrada y con un par de bases ocupadas antes de deshacerse de Gary Sánchez en un swing a medio camino y acababa con el peligro… por el momento.
Porque en la séptima entrada y con Verlander sufriendo con cada lanzamiento, los Yankees pusieron un par de corredores en base en Greg Bird y Starlin Castro, que fueron contestados con el strikeout sobre Aaron Hicks tras una titánica batalla que le llevó a superar la decena de lanzamientos y que George Springer protagonizase la jugada defensiva de la postemporada para los Astros al atrapar una bola profunda impulsada por el bate de Todd Frazier, que fue seguida de la eliminación de un renacido Chase Headley.
Con Chad Green sirviendo de apagafuegos y manteniendo el encuentro igualado, Verlander fue relevado por Brad Peacock que se vio beneficiado de una excelente jugada defensiva de Marwin González sin espacio en el outfield antes de que Aaron Judge lograse enmudecer al Minute Maid Park con un titánico home run que todavía espera aterrizar en la noche de Houston.
En un momento de máxima necesidad y con Peacock aparentemente superado por los acontecimientos, el diestro se deshizo de Didi Gregorius cuando parecía estar más fuera del partido que otra cosa y una fabulosa recuperación contra Gary Sánchez vía strikeout.
Una sorpresa inesperada
Con el partido en un pañuelo, Joe Girardi que recurrió a Dave Robertson, otro miembro de su afamado bullpen y que había estado cerca de haber sido automático durante estos playoffs… salvo porque esta noche no lo fue. Al home run de Su Señoría respondía con uno de su propia cosecha el otro gran candidato al MVP como es Altuve, que no era sino la chispa de un ataque que conseguiría despertar en esta serie nuevamente y que llegó a anotar tres carreras más gracias a Carlos Correa, Yuli Gurriel y Alex Bregman para situar el 7-1.
Con ese margen a su favor, A.J. Hinch recurrió a Ken Giles para lograr los tres outs que les separaban del séptimo partido y lo hizo, pero no sin sufrimiento al verse obligado a realizar 22 lanzamientos para hacer el trabajo.
En una serie que está teniendo de todo y con un drama que se puede apreciar en cada jugada, los New York Yankees contarán nuevamente con C.C. Sabathia mientras que los Houston Astros no han anunciado a nadie aunque todo parece indicar que será Charlie Morton.