Venezuela reconoce que ahora viene un grupo complicado
La Selección Venezolana avanzó a la siguiente ronda del Clásico Mundial. Ahora, en San Diego jugará ante República Dominicana, Estados Unidos y Puerto Rico.
Con apuros y gracias a un partido de desempate, frente a Italia, la Selección Venezolana de Béisbol logró avanzar a la siguiente ronda del Clásico Mundial. Ahora, en San Diego tendrá rivales de cuidado: República Dominicana, Estados Unidos y Puerto. La misión es complicada, reconoce el manager Omar Vizquel.
“Recuerdo cuando jugaba el séptimo partido de la Serie Mundial en 1997. Esa noche antes del juego fue de estrés y no me había vuelto a sentir así hasta esta noche. Ha sido un partido muy duro. Es un sentimiento raro, teníamos mariposas en el estómago todo el mundo. Finalmente ganamos y seguimos. El equipo no se rinde. Los italianos fueron una excelente oposición, han estado peleando todo el tiempo. Fue un gran juego. Hacia adelante miramos. Quiero disfrutar el día de hoy”, explica Vizquel.
Lo que ahora viene será por demás complicado. Venezuela debutará en la siguiente fase del Clásico Mundial este miércoles, enfrentando a Estados Unidos, en San Diego, California.
“El grupo, mientras más vas avanzando, se va haciendo más complicado. Imagínate: Estados Unidos, República Dominicana, Puerto Rico. Ya vivimos esa experiencia, Puerto Rico nos dio knockout (11-0 en la primera fase, en Guadalajara), vivimos un mal momento y no queremos pasar por eso nuevamente. Dominicana tiene un equipazo y son los campeones del último Clásico y por supuesto Estados Unidos tiene una espinita clavada, quieren avanzar hasta la final”, detalla.
La noche de este lunes, frente a Italia, la novena venezolana llegó al noveno inning con desventaja de 2-1. Omar Vizquel destaca la reacción que tuvo su equipo para venir de atrás y sacar la victoria que le permite seguir con vida en el Clásico Mundial de Beisbol.
“Indudablemente fue un momento muy emotivo. No habíamos conectado un batazo fuerte desde hace mucho tiempo y Miguel (Cabrera) pegó ese home run que despertó a todo el mundo. Fue un alivio, nos sacamos 150 kilos de la espalda. Ya al empatar el juego, teníamos otra oportunidad. Mi mayor preocupación era que nada más me quedaban dos pitchers en el bullpen disponibles para el día de hoy. Pero cada uno hizo su trabajo como es debido, para poder ganar el juego de hoy”, concluye Omar Vizquel.