Espanyol y Leganés juegan un partido en el extrarradio de los poderosos que, abusando de su fuerza, contaminan el fútbol auténtico. Por cierto: ¡Justicia para El Prat!
PorIván Molero
Espanyol y Leganés juegan un partido en el extrarradio de los poderosos que, abusando de su fuerza, contaminan el fútbol auténtico. Por cierto: ¡Justicia para El Prat!