
Mis adorables padres, Félix y Amparo, hubieran pagado de su bolsillo con tal de poder ocupar mi asiento en la maravillosa comida que ayer tuvimos con Conchita Velasco.
PorTomás Roncero

No necesito ningún portero”, dijo el sábado Zidane con su proverbial sencillez. Con ese tono neutro y seguro, sin circunloquios, de los que hablan un idioma que no es el suyo.
PorAlfredo Relaño

El Diccionario no recoge significados que respalden una oración como “se la come el portero”. No estamos ante un problema de incorrección, sino de estilo.
PorÁlex Grijelmo

Página34