¿Por qué se les llama “chocolate” a los autos ilegales en México?
Estos vehículos llegan al territorio mexicano de forma clandestina.
En México, es común escuchar o leer sobre los autos “chocolate”, término que se refiere a los vehículos ilegales o no registrados, que llegan al territorio mexicano desde Estados Unidos y circulan sin tener las placas y papeles expedidos como todo automóvil que se compra de forma legal.
Evidentemente, este término se ha arraigado en la cultura automotriz mexicana a lo largo de los años y se ha convertido en una forma común de referirse a estos vehículos, pero ¿por qué se les llama así?
¿Porqué se les dice “autos chocolate”?
Existen varias razones por las que se les llama “chocolates” a los autos irregulares que llegan a México desde la frontera norte. En primer lugar, el contrabando de automóviles en tierras mexicanas ha existido durante mucho tiempo y ha sido una forma de eludir las restricciones y altos impuestos que se aplican a la importación oficial de vehículos.
Estos automóviles ilegales a menudo se importan de forma clandestina desde Estados Unidos e incluso otros países, sin cumplir con los procedimientos aduaneros y las regulaciones establecidas por las autoridades mexicanas.
Ahora bien, el término “chocolates” se asocia con algo dulce, pero prohibido o clandestino. Al igual que los chocolates de contrabando, que pueden ser atractivos, pero no están permitidos legalmente, los autos ilegales en México se consideran como “dulces prohibidos”. Esta analogía refleja la idea de que estos vehículos ingresan de manera oculta o no autorizada al país, evadiendo los impuestos y requisitos legales necesarios para su legalización.
Además, los “autos chocolate” suelen ser autos de marcas y modelos que no están oficialmente disponibles en México. Estos vehículos pueden tener características y prestaciones especiales que los hacen deseables, pero al no ser importados de manera legal, se convierten en objetos de contrabando. De esta manera, el término “chocolates” también implica una cierta exclusividad o rareza asociada a estos vehículos no registrados.
Es importante tener en cuenta que el uso de automóviles ilegales o no registrados presenta diversos problemas y riesgos. Estos vehículos pueden no cumplir con los estándares de seguridad establecidos por las autoridades mexicanas, lo que pone en peligro la vida de los ocupantes y de otros usuarios de la vía. Además, al circular sin los permisos y registros adecuados, los propietarios de estos autos ilegales deberían enfrentar sanciones legales, como multas y decomisos.
Aunque son ilegales, la demanda de estos vehículos es sumamente elevada, ya que el gobierno mexicano ha implementado medidas para permitir su regularización a pesar de los riesgos y el impacto a la industria automotriz.
En conclusión, el término “chocolates” utilizado en México para referirse a los autos ilegales o no registrados tiene sus raíces en la práctica de contrabando de vehículos. Esta jerga coloquial se ha arraigado en la cultura automotriz mexicana y refleja la idea de que estos vehículos son dulces prohibidos que ingresan clandestinamente al país sin cumplir con las regulaciones y requisitos legales.