La decisión más importante de los Patriots
- Hola, Sr. Kraft quería presentarme con usted, me llamo Tom Brady.
- Sé quien eres, eres nuestra selección 199 en la sexta ronda del draft.
- Así es, y soy la mejor decisión que está organización ha hecho en su historia.
Así fue el primer encuentro entre Robert Kraft, dueño de los New England Patriots y Tom Brady. Leyéndolo 20 años después, parecería que Brady conocía el futuro y que su carrera, que en ese momento iniciaba, iba a ser la más exitosa de la NFL. La selección 199 más importante de toda la historia del fútbol americano sigue haciendo lo increíble: con seis anillos de Súper Bowl y 43 años de edad, Tom Brady está en búsqueda del séptimo y ahora con un segundo equipo.
Proveniente de la universidad de Michigan, Thomas Edward Patrick Brady Jr era el suplente de Drew Bledsoe, se ganó el mote de “el chico de los regresos”, y probó ser más valioso que el titular. Increíblemente, en el reporte del draft lo catalogaban así: “Sin musculatura, flaco, le falta fuerza, no tiene movilidad para esquivar la presión, no tiene gran fuerza en el brazo, no lanza espirales perfectas y se cae fácilmente”. Fueron justo ese tipo de palabras las que motivaron a Brady a ser el mejor.
Brady es de esas personas que toman todo a su alrededor como gasolina, por eso es un fuera de serie. Cuando todo el mundo pensaba que el siguiente paso era el retiro, que era un error el mantenerse en los emparrillados y con un equipo inferior, Brady demostró que le sobra para llegar a lo más alto y que todavía tendremos al mejor quarterback un rato.
Pero, ¿qué lo define como el mejor? Es seis veces campeón y cuatro veces el jugador más valioso del Súper Bowl. Es una vida de perseverancia, de sacrificios y de mucho entrenamiento, de un temple impresionante acompañando de un poco de suerte. Una mente privilegiada, que conoce perfectamente sus fortalezas y está dispuesto a explotarlas.
Es uno de los mejores líderes en la historia del deporte, supo motivar a un equipo balanceado, tomó la responsabilidad y el peso en los momentos complicados, al grado de bajarse el sueldo para que reclutaran mejores jugadores; entendió que una estrella no brilla si no está rodeada de quienes puedan sacar lo mejor de él. Tuvo la disciplina y la fortuna de tener una carrera larga con muchos juegos y pocas lesiones.
En 2020 se rompió la famosa mancuerna de Bill Belichick y Tom Brady, lo que llevó a muchas dudas: ¿Brady podría hacerlo solo? ¿Debió retirarse en lo más alto? ¿Era Tampa Bay equipo suficiente para la súper-estrella? Creo que las respuestas son claras.
Brady llegó al Súper Bowl contra todo pronóstico. Se encuentra una vez más en 'la fiesta grande' del fútbol americano, con el hambre y la seguridad que tenía aquel día que se presentó con Robert Kraft y el objetivo de la victoria muy claro. La experiencia juega a su favor, pesa y es un especialista en partidos de matar o morir.
Del otro lado llega el futuro de la NFL en la posición; Patrick Mahomes, quien ya se ha coronado, llega con un equipo más completo y equilibrado que el de Brady. La motivación de ganarle al mejor de la historia es un extra que, sin duda, le dará muchísimo sabor al encuentro del próximo domingo. ¿Será capaz Kansas City de ser bicampeón? Dicha hazaña no se logra desde que los Patriots vencieron a Eagles en el año 2004-2005, por supuesto, comandados por Tom Brady.
El ayer contra el mañana. El pasado contra el futuro. La historia se escribirá el 7 de febrero. Bill Belichick, Robert Kraft, sus jugadores y su afición verán desde su casa la decisión más importante de los Patriots.