David Patiño y la complicada misión de hacer olvidar a Maradona
El tiempo pasa y en Culiacán no se olvidan de Diego Armando Maradona. Toca turno a David Patiño, un timonel con amplia experiencia en la división de plata.
El tiempo pasa y en Culiacán no se olvidan de Diego Armando Maradona. Es como si la afición de Dorados hubiera perdido la fe de ascender a la Liga MX con la partida del timonel argentino que ahora hace de las suyas dirigiendo en su país.
Llegó Pepé Cruz, y nada pasó. Se fue como llegó: sin la confianza de los sinaloenses, sin su visto bueno.
Y es que además del ídolo intrínseco, con Maradona se les fue el hombre que puso a Dorados en dos finales consecutivas, ahí, a nada de la Primera División. Está claro: hay un antes y después de Diego Armando en Sinaloa.
Toca turno a David Patiño, un timonel con amplia experiencia en la división de plata que sabe lo que es jugar finales en este circuito e, incluso, conseguir el ascenso y, por si fuera poco, con el plus de haber dirigido a Pumas, uno de los llamados cuatro grandes.
En entrevista con As México, el nuevo timonel de Dorados reconoció la huella que, con su trabajo, dejó Maradona en su paso por el equipo, algo que, reconoce, será difícil de igualar.
“Diego (Maradona) hizo un magnífico trabajo aquí, se reflejó en el hecho de que el equipo llegó a dos finales y también se reflejó en el hecho de que el equipo tenía un buen plantel, no, no me pesa suplirlo, pero le reconozco mucho el trabajo que hizo”, señaló.
Y agregó: “Dorados es un reto muy importante, sé de la dificultad que conlleva. Es uno de los equipos aspirantes al ascenso, su lugar pertenece a la Primera División. El grupo confía en que el proyecto conmigo puede consolidarse”.
-¿Qué es más difícil: dirigir a uno de los grandes o dirigir en el infierno que es el Ascenso?
“Pumas es grande, pero es grande por su ideología más que por otra cosa, siempre ha jugado con la idea de darle oportunidad a los jóvenes, de trabajar con presupuesto medio-bajo, no es grande por los presupuestos que maneja, en ese sentido, estoy habituado a ese tipo de proyectos, y el ascenso es muy complejo porque lo único que vale es llegar a Primera División más allá de tener un buen desempeño, a mí me ha tocado jugar finales y perderlas por un penal”.
Pumas y la muerte del romanticismo
Patiño es puma de cuna. Nadie lo pone a discusión. Así que, desde el exilio, habla con autoridad de la institución universitaria. Lo hace fuerte, directo y sin tapujos. Para David, la tan achacada mística puma ya es puro romanticismo y poca realidad.
“En los dos torneos que dirigí, calificamos, peleamos por el título con un plantel de presupuesto bajo, con jugadores jóvenes, lo que cual hace evidente que se puede. Pumas por eso se caracterizó y se hizo grande, y si no tiene eso, no es Pumas. No me da tristeza ver cómo está ahora, y ojala y se mantuviera el proyecto, pero lo dudo, porque quizá sea un romántico, pero a nadie le importa ya eso, todos los equipos tienen llenas sus plazas de extranjeros. La directiva anterior y yo como técnico de ese equipo, lo que tratamos de hacer de una manera soñadora si quieres fue replicar el modelo que hizo grande al equipo”, comentó.
