Ricardo Peláez pide un proyecto sólido para firmar con Chivas
Para firmar y convertirse en el nuevo vicepresidente deportivo de Chivas, Ricardo Peláez exige estabilidad y continuidad por al menos cuatro años.
Luego de la primera reunión entre Ricardo Peláez y Amaury Vergara, presidente de Chivas, hay puntos claros sobre la mesa. Para firmar y convertirse en el nuevo vicepresidente deportivo del Rebaño Sagrado, el dirigente necesita estabilidad. Por eso, ha pedido un proyecto sólido, que le garantice continuidad del al menos cuatro años, pues eso considera que es lo necesario para responder con los resultados esperados.
Según ha podido saberse, esa es una de las principales condiciones que Peláez puso sobre la mesa durante el primer encuentro, de casi cuatro horas, el martes en las instalaciones del corporativo Omnilife. Además, el dirigente necesita algunas condiciones similares a las que ha tenido en el pasado con América o Cruz Azul, como un control pleno sobre las decisiones deportivas.
El dirigente requiere, además, de un presupuesto importante pues según fuentes allegadas a la negociación, ha comenzado ya a estudiar el mercado. Tiene un panorama general de lo que el Guadalajara puede necesitar y, por tanto, existe también una idea de lo que podría costar reforzar de forma importante a Chivas, de cara al próximo semestre.
Cansado de los constantes fracasos, Amaury Vergara estaría dispuesto a abrir la cartera. Los contratos por derechos de televisión están a punto de terminar, por lo que en enero las finanzas del club se verían fortalecidas. Se espera que los ingresos sirvan para reforzar y conformar un plantel competitivo. Pero a pesar de esa disposición, una de las condiciones que el presidente del equipo puso sobre la mesa es desarrollar y explotar, por fin, las fuerzas básicas para que en el futuro no sea tan necesario hacer contrataciones costosas.
El tema económico, según se pudo saber a través de distintas fuentes, sigue siendo uno de los más delicados en la negociación. Se asegura que Ricardo Peláez requiere de un presupuesto de alrededor 40 millones de dólares, algo que para la economía de Chivas luce complicado. Ofrecer cuatro años de contrato no sería el problema. Esa condición parece solventada.