COREA DEL SUR 1-2 MÉXICO | GRUPO F
Desaparece grito de “puto” en Rusia
La afición por fin se olvidó del polémico grito que ponía en jaque a la Selección Mexicana.
Existe una comunión casi perfecta entre el equipo y sus aficionados. No solo entendieron la noche previa que era necesario retirarse del hotel de concentración para dejar descansar a los seleccionados nacionales. Sino que también comprendieron que el grito de “puto”, por más arraigado que esté en el folclore futbolístico de México, hay que erradicarlo.
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Este sábado, durante el triunfo del Tricolor por 2-1 sobre Corea del Sur, en la Arena Rostov, el grito simplemente no apareció. Los más de 35 mil seguidores mexicanos presentes en el estadio se han comportado a la altura de una Copa del Mundo. “Yo la neta, si veo a alguien gritarlo si le voy a decir que se calle a la chingada. Nos puede perjudicar, que no mame”, decía uno de ellos antes de ingresar al inmueble.
Y como él, miles. Nadie quiere dañar a la Selección Mexicana. “Imagínate perder puntos en la mesa con tanto pinche trabajo que nos costó ganarle a Alamenia”, agregaba el mismo seguidor, ya con algunas cervezas encima, minutos antes de arrancar el segundo encuentro del Tricolor en el Mundial de Rusia 2018.
Dentro, se ha cumplido al pie de la letra. Nada de grito. El riesgo de una nueva multa o de un castigo mayor no se deberá correr, pues esta vez la manifestación homofóbica no estuvo presente. Sólo una vez a lo largo de 90 minutos, apareció el bullicio del “eeeeh” cuando el arquero estaba por despejar. Fue de un sector de la tribuna nada más y cuando pateó, no gritaron “puto”, sino algo mucho mejor: “Uno, dos, tres, chiquitibum a la bim, bom, ba, a la bio, a la bao, a la bim, bom, ba, México, México, ra, ra, ra”.
En la cancha, victoria por 2-1 sobre Corea del Sur. En la tribuna, otro gran triunfo para el balompié nacional: el grito de “puto” se ha erradicado... al menos en Rostov.
