Chivas cae ante León en la jornada 17 del Clausura 2018
La alegría de la Concacaf nadie la borra. Pero en la Liga MX, Guadalajara ha cerrado un torneo de pesadilla, indigno de su gran historia.
La alegría de la Concacaf nadie la borra. Pero en la Liga MX, Guadalajara ha cerrado un torneo de pesadilla, indigno de su gran historia, que deberá arrojar infinidad de reflexiones de cara al futuro. Negra despedida: dos penales fallados y derrota como local por 0-2 ante León. El Clausura 2018 ha terminado para Chivas sin un solo triunfo en casa.
Desde la victoria del 28 de mayo pasado, en la Final frente a Tigres, el Rebaño Sagrado ha ganado solo una vez ante sus aficionados. Fue el torneo pasado, en la fecha 15 frente a Tijuana. El actual semestre ha concluido: Chivas es penúltimo de la tabla con paupérrima suma de 15 puntos y sin un solo triunfo en casa. Terrible.
La noche de este sábado el Guadalajara intenta con poca convicción. El ánimo del equipo parece haberse terminado el miércoles pasado, en la Final de la Concacaf. Pese a todo, el arranque es movido. Edson Torres genera la oportunidad con un autopase, entra al área y dispara por un lado, al minuto 2. La visita responde enseguida: centro de Elías Hernández y el arquero Rodolfo Cota sale a tiempo para tapar el remate de Maximiliano Cerato, al ‘4.
Tiene ritmo el arranque del encuentro. Chivas busca, Orbelín Pineda se abre espacio con una finta, su disparo es potente, pero William Yarbrough rechaza, al ‘11. Más tarde, Ángel Zaldívar recibe en el área, cubre con el cuerpo, Miguel Herrera recarga por detrás y cuando cae, se lleva la bola con la mano. El árbitro marca penal.
El propio “Chelo” Zaldívar toma la pelota. Infalible desde el manchón. Efectivo cada vez que ha estado ahí, parado frente a la pelota, incluso en momentos de mucha mayor presión que esta noche, cuando ninguno de los dos equipos tiene aspiraciones. Dispara de zurda, potente y cruzado. Yarbrough adivina la trayectoria, se estira y tapa. Primer penal fallado en la carrera del rojiblanco, al ‘36... y en el contrarremate, la vuela. Todo mal.
Y en cuestión de futbol, el que perdona casi siempre pierde. Ataque esmeralda por el costado izquierdo, a la espalda del lateral. Por eso, el central Miguel Basulto sale al encuentro de Maximiliano Cerato. La marca es débil y permite el centro pasado. Hedgardo Marín se perfila mal y se pierde en la marca. Mauro Boselli solo tiene que conectar cruzado, de cabeza, para el 1-0, al ‘43.
En la segunda parte, Matías Almeyda hace algo que nunca había intentado con Chivas: tres cambios al mismo tiempo. Se van del campo, al ‘56, Edson Torres, Walter Gael Sandoval y Michelle Benítez. Entran Rodolfo Pizarro, Alan Pulido y Carlos Cisneros. El equipo gana experiencia, pero el problema en la cancha en realidad no se resuelve.
Llega más, pero falla igual. Isaac Brizuela conecta un zurdazo colocado que obliga al vuelo de Yarbrough, quien desvía a tiro de esquina, al ‘59. Y dos minutos más tarde, el propio “Conejito” llega a línea de fondo, centra a media altura y José de Jesús Godínez conecta de cabeza, pero la redonda se estrella en el travesaño.
Una nueva desatención. Saque de manos por el costado izquierdo. Se cobra largo, hacia Mauro Boselli. Le marca tibiamente Hedgardo Marín, quien le permite dar vuelta para prolongar así como viene. Gran pelota al espacio para Luis Montes y Orbelín Pineda ha tardado en seguirlo. El “Chapo” define frente a Cota para el 2-0, al ‘70.
Guadalajara encuentra otra oportunidad de meterse al juego: penal de Miguel Herrera sobre Rodolfo Pizarro. Es el propio 20 del Guadalajara quien pide la redonda. Cobra desde el manchón con pierna derecha. Cruzado... demasiado. La bola se escurre por un lado. Así es imposible. Nuevo penal fallado, al ‘83. No hay más. Chivas cierra un torneo de pesadilla: 15 puntos, lugar 16 de la tabla y cero triunfos en casa.
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