Invertir para lograr los frutos
Hace cinco años la federación inglesa se gastó una millonada en una Ciudad Deportiva. 110 millones de euros exactamente. Reconoció las lagunas de su fútbol y aplicó dinero e ideas para cambiar las cosas. Saben que sus jugadores son rápidos y fuertes, así que, tras añadirles conocimiento táctico y una idea clara de juego que pasa por las bandas, el pase al espacio y la agresividad medida, se ha convertido en el fútbol de moda de los últimos doce meses.
Solamente Brasil ha conseguido un Mundial Sub-17 y un Sub-20 el mismo año. El equipo Sub-20 que ganó el Mundial fue la primera generación que disfrutó de sus instalaciones y filosofía. El que venció ayer es otro grupo que se prepara, entrena y se le da consejos muy parecidos a los que reciben los jugadores de las grandes selecciones europeas. La pena es que casi nadie es capaz de tirar abajo la puerta de la Premier, donde falta paciencia y valentía.