Muñiz tiene segunda unidad
Muñiz tiró de rotaciones y la segunda unidad le respondió. Oier dejó la portería a cero con dos intervenciones de mucho mérito. Boateng rompió la sequía goleadora de los puntas del Levante que no habían visto puerta todavía. Cabaco ralló la perfección en la zaga. Doukouré, sobrio como siempre que ha jugado y se sumó a la fiesta con un gol. Lukic quizá fue el más gris de los menos habituales. Y el canterano Shaq, aunque sufrió con la velocidad de Mojica, cumplió dejando constancia de que se puede contar con él. Éstas son las conclusiones que debió extraer Muñiz ayer más allá de un 0-2 que valora igual que si hubiera sido al revés a favor del Girona. La Copa no importa más que para eso.
La pregunta ahora es hasta qué punto el técnico lo va a tener en cuenta. Nadie prefiere tirarse piedras contra su tejado pero hasta la fecha poco o nada se había visto a unos futbolistas que demostraron poder jugar en cualquier momento. Y más viendo el mal momento de sensaciones que pasa el equipo en Liga donde ya son cuatro partidos sin ganar. Pero a Muñiz no le convencen muchos de ellos. O así lo ha dejado caer dejándoles en la grada cada semana y con mensajes subliminales en las dos últimas ruedas de prensa. Yo pongo a los que creo mejores. El resto, al otro despacho”, dijo ante el Getafe ¿Se atreverá el técnico a cambiar algo?