Rubiales pide el voto de censura a Villar el 24 de noviembre
Ha recabado firmas en blanco para promover la moción. Ya casi tiene los avales necesarios. Villar resiste, y puede cambiarlo todo con un golpe de timón: su dimisión.
Luis Rubiales, presidente de la AFE, ha pedido firmas en blanco entre los miembros de la Asamblea del Fútbol para promover una moción de censura a Villar, que sigue sin dimitir como presidente de la Federación pese a su imputación por malversación y fraude fiscal, entre otras de las acusaciones que le ha hecho la Fiscalía Anticorrupción. Rubiales quiere presentar la moción el viernes 24 de noviembre, sólo 48 horas después de que se cumpla el plazo legalmente exigible para proponerla.
Rubiales, que implantó la limitación de mandatos cuando alcanzó la presidencia de la Asociación de Futbolistas Españoles, tiene por delante algo menos de 24 meses al frente de la AFE. Dentro de dos años no podrá seguir al frente del sindicato. Su idea era dar el salto a la Federación (RFEF). Y así hubiera sido si Villar no hubiero sido encausado y el juez Pedraz no hubiera desentrañado los manejos en los votos de la Asamblea del Fútbol, compuesta por 139 miembros que o bien eran víctimas del clilientelismo o bien del voto cautivo, cuando no de ambas cosas.
Pero Rubiales, que progresó al abrigo de Villar, perdió su favor cuando decidió votar a favor de su inhabilitación en el CSD. Y pasó de delfín a repudiado del villarato. Ahora, Rubiales va al asalto de la poltrona de la RFEF, pero en su afán va a encontrar el obstáculo de algunos de los líderes de opinión del fútbol, entre otros los de Javier Tebas y los de varios presidentes de Territoriales entre las que se encuentran las muy poderosas de Madrid y Andalucía, entre otras muchas. Rubiales tiene a favor a Cataluña, aunque la Ley del Deporte prohíbe expresamente pagar una nómina a los directivos de federaciones que no ostenten la presidencia.