El Liverpool no venderá a Philippe Coutinho. Ese mensaje le llegó al propio jugador cuando se reunió con el Liverpool justo antes del golpe de ira que le hizo pedir el traspaso al club (transfer request). Y es lo que se le ha dicho al Barcelona tras rechazar, todas ellas en menos de 45 minutos, las tres ofertas que han llegado hasta ahora a Anfield. Se espera una cuarta que el Barcelona tiene preparada, pero también se sabe la respuesta: no está en venta, y no vuelvan más.
El Liverpool tiene 160 millones por gastar y saben que si se desprende del brasileño sus posibles reemplazos se venderán por encima de su valor. El prestigio de los dueños americanos, FSG, sufrió un gran daño tras vender algunas de sus grandes estrellas: Alonso, Torres, Mascherano, Suárez. John Henry y Mike Gordon. Máximos accionistas de FSG recuerdan cómo sus traspasos debilitaron al equipo y costó mucho reconstruirlo.
Una posible venta de Coutinho jugará en contra del club cuando jugadores como Firmino o Mané reciban ofertas para marcharse. El Liverpool quiere evitar oír: “Le dejasteis marchar, ahora nos tenéis que dejar ir”.