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¿Nadie es superior al Barça? Valverde y el dilema

MéxicoActualizado a

La frase es suficientemente clara: "¿Admitir que el contrario es superior a ti por sistema? Nadie lo asume. Ni el Madrid ni ninguno es mejor que nosotros. Ni el Madrid, ni el Atlético, ni el Bayern Múnich…". La firma Ernesto Valverde en la rueda de prensa previa al partido de vuelta de la Supercopa que aguarda mañana en el Bernabéu. Muy seguro de sí mismo se muestra el técnico extremeño, muy seguro del arsenal del que dispone a sólo cuatro días de que dé comienzo una Liga en la que su Barça no puede aspirar a otra cosa que al título.

Si nos creemos a pies juntillas a Valverde, entonces, ¿qué sentido tendría gastar por gastar y comprar a precio de angula lo que no es más que trucha de piscifactoría? ¿Por qué deben venir Coutinho o Dembélé si con la actual plantilla basta para luchar con garantías por todos los títulos en juego?

Porque, con todo el cariño hacia Valverde, me da que ni él mismo se lo cree. Obviemos las urgencias de la directiva, que pretende ocultar bajo fichajes de campanillas la política realizada en los últimos meses. Este Barça no es el Barça que disfrutábamos hace apenas un par de años. No vamos a recordar aquí ciertos males que son evidentes como la fragilidad defensiva, la factura a pagar tras el adiós de Xavi o el envejecimiento de Iniesta. Todo ello ha contribuido en el apagón de un equipo que fue referente del fútbol mundial hace nada.

Busca la remontada en el Bernabéu

El fútbol es caprichoso y en ocasiones la pelota bota para donde menos te lo esperas. Podría ocurrir que mañana, en el Bernabéu, el Barça remontara, que eso sirviera para encender bengalas en Canaletas, que Bartomeu recuperara la sonrisa... Podría ocurrir, pero todo ello no escondería ese elefante pintado de rosa que aguarda sentado en el salón: el Barça debe fichar un centrocampista de renombre y un delantero que haga olvidar a Neymar, el futbolista azulgrana más desequilibrante y valiente en buena parte de la última temporada. Sólo así me da que la frase de Valverde será cierta.