Carrera de Nick Fairley en riesgo por padecimiento cardiaco

La defensiva de los New Orleans Saints no podía darse el lujo de perder a nadie, mucho menos a una fuerza devastadora en medio de la línea como Nick Fairley y menos antes de iniciar la campaña.

Un día más en la vida de una defensiva que no ha salido del último tercio de la liga durante las últimas tres campañas.

Y lo que viene podría ser peor. Fairley fue colocado en la lista de reservas lesionados con lo que su temporada llegó a su fin antes de iniciar. El problema: un padecimiento cardiaco congénito.

Y esas son las buenas noticias.

De acuerdo con el coach de los Saints, Sean Payton, Fairley ha consultado con al menos tres especialistas y por lo menos uno de ellos recomendó que deje atrás sus días como jugador en activo. A lo largo de sus seis temporadas como profesional, Fairley ha recibido muchos golpes, ninguno más fuerte que las palabras de un médico resonando en la cabeza de un jugador de 29 años de edad.

En el aspecto deportivo, los Saints pierden a una pieza clave en su intento por dejar de ser el hazmerreír defensivo del Sur de la NFC. En 2016, su primera temporada en New Orleans, Fairley gozó de su mejor campaña como profesional al lograr marcas personales en sacks (6,5) y tacleadas con 29, luego de cuatro años irregulares con Detroit y uno francamente malo con los Rams.

En cuestiones administrativas la situación tampoco es sencilla pues Fairley firmó a inicios de este año un contrato por cuatro años y alrededor de 30 millones de dólares, 14 de ellos garantizados y un bono de firma por 8 millones. Eso es mucho dinero y alguien va a querer sacarle provecho.

Debido a que la lesión no está relacionada con el football, los Saints no tienen la obligación de pagarle su salario base para la próxima campaña, es decir un millón de dólares, pero está en duda lo que pudiera pasar con el resto del contrato, garantías y bonos incluidos.

Si Fairley cree que los diagnósticos médicos que recibió son disparatados y que su corazón no es más grande que lo normal, podría llegar a un acuerdo legal para devolver todo o gran parte de su dinero garantizado a cambio de su liberación e intentar proseguir su carrera en otro equipo.

Pero si los resultados son contundentes, lo más inteligente sería pelear por conservar la mayor cantidad de dinero posible.