TRINIDAD Y TOBAGO VS MÉXICO | PREVIA
El visado para Rusia se tramita en Puerto España
La Selección Mexicana busca en Trinidad y Tobago tres puntos que lo acerarían al Mundial; la victoria lo colocaría con 10 puntos, solo uno menos que los que logró en la eliminatoria de 2013.
Un hexagonal sin problemas. Una rareza. Por primera vez en tres procesos mundialistas (desde Alemania 2006), la Selección Mexicana lidera la fase final de la eliminatoria de Concacaf. El Tri se había acostumbrado al estado de crisis, a caminar sobre la cornisa, a los ataques de ansiedad, las alertas rojas, los simulacros, el delirio... Parecía que la clasificación sin pulsión de muerte no valía.
La Selección de Osorio, que aún frunce ceños, ha volado sin sobresaltos, hasta ahora. Las alarmas prendidas tras el batacazo en Santa Clara se apagaron con el correr de los días. Las sensaciones son otras: las dudas aún planean sobre el colombiano y su capacidad de aplicar su discurso en la práctica, pero los números son irrefutables: 15 victorias, tres empates y una derrota. A estas alturas, en los hexagonales de 2009 y 2013, México solo había recolectado tres puntos, a diferencia de los siete de hoy día. Y a estas alturas, en 2009, Eriksson había sido despedido ya (el 3-1 en Honduras lo sentenció); y en 2013, el 'Chepo' ya había empezado a perder los estribos. Hoy, Osorio filosofa, loa a sus futbolistas ("Vela ha entendido la exigencia del fútbol"), no sobre-reacciona ni ante una pregunta de mal talante, y ni siquiera se atreve a dar campanas al vuelo. Rusia aún no está en su vocabulario, aunque sí el horizonte (no tan lejano).
Las célebres rotaciones del colombiano tendrán justificación. Talavera tendrá el encargo de neutralizar a la fuerza aérea trinitaria, Alanís y Reyes podrían sellar la retaguardia, Dueñas apunta a cubrir un lateral aunque quizá quepa recordar el sufrimiento al que Edson Puch y Alexis Sánchez le condenaron en Santa Clara, Molina está llamado a coordinar el flujo de juego, Orbelín por fin aspira a una oportunidad y Jiménez sustituiría al tocado Chicharito en el tridente de ataque. Osorio declaró que las dolencias de Hernández no le alejarían del encuentro, pero a juzgar por su política, es probable que el ariete del Bayer Leverkusen deba resignarse a compartir con Borgetti el récord por unos meses más.
La Trinidad de Denis Lawrence, quien sufrió las embestidas del 'Cabrito' Arellano en 2004 y representó a los 'Socca Warriors' en Alemania 2006, amenaza con el buen pié de Cato, el poder de Kevin Molino (autor del gol que les dio la victoria ante Panamá) y la habilidad de Kenwyne Jones, jugador del naciente Atlanta United, capitán y encargado de reverdecer las glorias heredadas por Rusell Latapy y Dwight Yorke. El equipo trinitario, ya sin el cobijo del inefable Jack Warner, es tan dura y metálica como un tambor de calipso. Que nadie se fíe. Han anotado siete (!) goles a la Selección Mexicana en los últimos dos partidos disputados entre ambos. Dos avisos. ¿La tercera será la vencida?
En Puerto España se tramitan los visados rumbo a Rusia. México ya se apunta para reservar cita. Trinidad y Tobago sueña con inscribirse en la lista de espera.
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