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NFL Draft

El espantoso, horroroso, nada óptimo draft de la NFL 2013

D.J. Fluker ha sido cortado por Los Angeles Chargers y eso es un clavo más en el ataúd de una promoción que ha dado más disgustos que alegrías.

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El espantoso, horroroso, nada óptimo draft de la NFL 2013

Hoy comienza el periodo en el que los equipos de la NFL pueden contactar con los agentes de los jugadores que pretenden fichar en la agencia libre. Ésta no se abre hasta el jueves, pero las franquicias han de moverse con celeridad para que no les quiten sus preciados objetos de deseo. Por eso mismo, hoy es un día en el que veremos a muchos veteranos siendo cortados para hacer hueco, físico y salarial, ante la llegada de los nuevos.

Uno de esos veteranos que, de repente, se encuentra en el paro es D.J. Fluker, el polivalente hombre de la línea ofensiva de Los Angeles Chargers. Y por polivalente me refiero a que lo puede hacer mal en varias posiciones de la OL. Fluker fue todo un número once del draft en 2013 y, ante lo que debería ser el quinto año de su contrato rookie, se ha visto lanzado a la incertidumbre de la agencia libre.

Sirve el caso de este hombre para recordar una promoción de jugadores que, sencillamente, ha sido una catástrofe. El draft del 2013 será recordado como uno de los peores de los tiempos recientes. Echar un ojo al top diez, casi que a la primera ronda en su conjunto, da pánico.

Muy especialmente, en la posición de los hombres de la línea, de los left tackle. Tanto que tan sólo un lustro después es difícil verles copando los puestos estelares del proceso de selección de rookies, tal y como sucedía hasta este 2013 del que hablamos. Es evidente que los factores para que se produzca este fenómeno son varios y no se pueden achacar sólo a una mala clase, pero seguro que ayudó.

El top 3 fue un horror

Eric Fisher (OT, Kansas City Chiefs), Luke Joeckel (OT, Jacksonville Jaguars) y Dion Jordan (DE, Miami Dolphins) fueron las tres primera elecciones. Sólo el primero está teniendo una carrera decente y, desde luego, a años-luz de lo que se espera de todo un #1 del draft. Joeckel tiene muchas papeletas para ser cortado en breve y, aunque no lo fuese, los Jaguars llevan años intentando buscarle un sitio en la OL donde pueda rendir, sin conseguirlo. Jordan es un fracaso sin excusas ni asteriscos.

Hay que bajar hasta el número cuatro para encontrar a un buen jugador en Lane Johnson (OT, Philadelphia Eagles) aunque con problemas de uso de sustancias que le han tenido apartado de la competición demasiado como para poder considerarle un acierto. Ziggy Ansah (DE, Detroit Lions), en el #5 si ha hecho feliz a su equipo.

A partir de aquí de nuevo la catástrofe: Barkevious Mingo, Jonathan Cooper, el citado D.J. Fluker y Dee Milliner ya no están con los equipos que les draftearon, Tavon Austin no será confundido con un receptor estrella de la liga y D.J. Hayden es sólo uno más en la defensa de los Raiders.

Los QBs dan lástima

Hablemos de los QBs. Pero hablemos muy poco, que no merecen más. Con deciros que el único que mereció una elección de primera ronda fue E.J. Manuel, por los Buffalo Bills, debería bastar. Sin embargo, dejadme añadir que sólo otro se mereció una elección de segunda ronda: Geno Smith. ¿Alguna duda al respecto?

Es que la "estrella" de la clase fue nada menos que Mike Glennon, posicionado ahora para hacer caja en la agencia libre merced a que apenas le hemos visto y a que el equipo que apostó por él, enseguidita apostó de nuevo por otro QB, Jameis Winston que, ojo, parece un poco mejor que todos los nombrados. Matt Barkley, Landry Jones... en fin.

No todo es malo

Por supuesto, no todo es malo en un draft. Faltaba más. En una liga con tanta rotación de jugadores, donde tan importante es el físico y la juventud, que de más de 250 jugadores no salieran algunos realmente grandes no tendría ningún sentido estadístico. Y en 2013 tuvimos un puñado de tipos que nos levantan del asiento en cada jugada, de esos por los que los general managers de los equipos dan gracias de tenerles en sus filas antes de acostarse cada noche.

Son los casos de Le'Veon Bell, Travis Kelce, Kawann Short, DeAndre Hopkins, Travis Frederick, Tyrann Mathieu, Jordan Reed o David Bakhtiari.

En total, el número de pro bowlers de la promoción de 2013 hasta el momento es de 21. Es una cifra baja.

En 2012, por ejemplo, son ya 32 los que han sido elegidos para el partido de los mejores. No es que la comparación sea del todo justa, por supuesto, que un año más se nota en esta liga, pero es que en 2014, donde la diferencia debería ser muy abultada a favor de 2013 en condiciones normales, ya van por 20 pro bowlers.

Si sumamos el desastre del top tres, del top diez, de la primera ronda, de los QBs... el resultado que nos da es el de un año malísimo en el draft. Tanto que cambió la forma de elegir algunos jugadores, como los de la línea ofensiva, y que no puede ser tapado porque existan algunas muy notables e imponente figuras de la liga en su seno.