El Athletic remonta y devuelve a la vida al APOEL
Un gran partido de los leones dejaba la eliminatoria medio ventilada, pero con 3-1 un despiste al final metió a los chipriotas de nuevo a la eliminatoria.
La moqueta de San Mamés se dejó pisar una vez más por el clásico Athletic en un día que parecía rutinario en la oficina de las remontadas y acabó con miedo en el cuerpo. El día, cosas de estos inviernos que no son, había sido playero en Bilbao y la noche invitaba a poner la toalla en el asiento del campo y disfrutar de la vista. Son numerosos los adversarios que pasan por el coliseo rojiblanco con mucho más ánimo que potencial, con más pose que munición, pero a golpe de corneta, por remontadas que llevan camino de hacer historia, acaban en la lona. El último pagano parecía el APOEL, pero se saltó el guion y con una pegada de Champions: tres aproximaciones a meta y dos goles y un paradón de Iraizoz. Al final, agradeció el gesto de los leones de dejarse llevar por las emociones. Eso se paga y ahora tendrán que sacar su mejor versión a domicilio.
A diferencia de otras tardes, en la que el Athletic no precisó de un certamen de fútbol total para sellar victorias en casa, esta vez sí agarró el juego, con dos mediocentros escalonados y dando profundidad. Supo juntarse en campo contrario con balón y fueron aflorando jugadores en diferentes alturas. Salió y a los cuatro minutos ya tuvo una triple ocasión en el córner, frente al frontón del APOEL, que esperó acontecimientos en medio campo aguantando el chaparrón para tratar de trasladar la decisión del cruce a su fiero estadio.
Era fundamental abrir el candado chipriota, al que le escocía la gestión del espacio por los costados. El acoso y derribo estaba ahí, pero faltaba eficacia y claridad, así que el agazapado equipo chipriota saltó por su presa: los leones se volcaron tanto que en un cambio de orientación te pueden coger la espalda y rematar con la increíble clase de Efrem, para dejar helado San Mamés. Corría el minuto 35; el Athletic se puso el buzo de remontador y en dos minutos ya cumplió la mitad del trabajo, con una diana de traca: disparo de Williams que atrapa Waterman y Balenziaga en el otro lado lanza un zapatazo que golpea en dos rivales, uno de ellos Merkis en la cara, para el empate.
El segundo tiempo fue un monólogo y arreciaron los goles. El APOEL se recluyó a su papel de resistente y el Athletic trató de digerir el juego y estar más concentrado. Yamberé se saltó el guión e intentó la torpeza de sacarla jugada: se la regaló a Muniain para fraguar el 2-1, obra de Aduriz. El séptimo del año en Europa. Nueva remontada. De Camargo tuvo una ocasión clarísima, que le abortó Iraizoz y de eso al siguiente paso fue un golazo de Williams tras pase portentoso de Raúl García. Lo tenía encarrilado pero se despistó a dos minutos para acabar, dejó suelto a Gianniotas para que la eliminatoria reviva. El infierno chipriota tiene la palabra.