Florin pisa hoy tierra prometida

Por segunda vez en la temporada el Deportivo se acerca a un parón liguero con la necesidad de ganar, de tomar impulso para no convertir los próximos 15 días en un mar de dudas y miedos sobre el proyecto. La última vez, lo solventó con un agónico triunfo sobre el Sporting con un gol de Babel. Hoy, ante el Granada, lo intentará repetir con el impulso de las buenas sensaciones recuperadas frente al Valencia. Buena parte de ellas salieron de las botas de Emre Çolak, que una vez indultado demostró fútbol, carácter y galones.

Las opciones de victoria pasarán en gran parte por el talentoso turco, pero también por solucionar de una vez por todas el problemazo que tiene el equipo con el gol. Ayer Garitano no escondía el déficit, lo reconocía y hacía propósito de enmienda. Las esperanzas siguen puestas en Florin, un ejemplo de entrega al que le está faltando puntería y suerte. El rumano supera ya los mil minutos en partidos oficiales sin ver puerta y el Depor, el menos goleador de LaLiga, lo está acusando. Gaizka suspiraba ayer porque se corte ya el gafe y Los Cármenes es el mejor escenario para ello. Allí marcó su primer gol al llegar a España con el Atlético Baleares, y allí también se estrenó con el Córdoba. Ahora el Depor espera su primer gol y nada mejor que el regreso a tierra prometida para acabar con la sequía.