“Zully” Ledesma no se enorgullece de la bronca en la victoria histórica de Chivas sobre América

Han pasado casi 41 años cuando los jugadores de América y Chivas se dieron hasta la cubeta en una de las dos broncas históricas entre los dos mayores equipos antagonistas en el futbol mexicano, pero uno de los actores principales de ese juego en el partido de ida de las semifinales de la temporada 1982-83, como Javier “Zully” Ledesma, recuerda claramente cada minuto de lo que aconteció en dicho partido en donde nadie daba un peso por las Chivas y terminaron alzándose con una victoria histórica sobre el cuadro de Coapa.

Empero, más allá del placer que significó esa victoria, para el gran ex portero de Chivas por la forma como se dio en esa época, no tuvo reparo para admitir a AS México que no es un tema para enorgullecerse, sino por el contrario establecer que fue algo negativo, pero que en un juego con tanta pasión y tanta polémica al final esas mismas ganas los rebasaron y no pudieron evitar trenzarse en una refriega de puñetazos y patadas que envidaría el mejor de los representantes de la lucha libre.

“Nos rebasó la pasión, pero no me enorgullezco de lo que paso, creo que, en estos tiempos, lo digo a toro pasado, no estamos para festejar la violencia, por eso espero que el domingo todo se resuelva dentro del deportivismo y la rivalidad deportiva”, expuso.

¿Cuándo viste en la televisión las escenas de la bronca que dijiste?

Me sigo riendo la verdad, vimos la repetición, tuvimos la oportunidad de observarla como grupo en ese entonces, todo el equipo y la verdad nos daba risa, porque me pegaban a mí, le pegaban a otro, uno respondía, respondía el otro, después era el cotorreo de lo que nos tocó vivir dentro del terreno de juego y para mí lo que paso en la cancha ahí se queda.

¿Cuál fue el detonante?

Claro, el detonante fue la tercera anotación de Sammy Rivas, el tercer gol en donde Roberto Gómez Junco le pone el balón hacía la derecha a Sammy Rivas y él que en paz descanse, le pega con la pierna derecha a primer poste y donde Zelada no tuvo chance de reaccionar, el balón pega en la base del poste izquierdo y donde liquidamos el partido.

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¿Entonces no fue que Gómez Junco se fue a burlar de los del América?

Después de eso, de esa anotación Robert Gómez Junco fue a festejar como ellos lo hicieron los dos goles que nos hicieron en el Jalisco y ahí ya no aguantaron y se suscitó todo eso, pero ojalá que este domingo en el juego de vuelta no sucedan este tipo de situaciones, porque puede sonar chusco, pero no me enorgullezco de haber sido un ejemplo de esta naturaleza en ese partido.

¿Al final de cuentas son cosas que en el futbol no deben suceder, pero los rebasó la pasión y el calor?

Si, nos rebasó la pasión, pero creo que en nuestros tiempos no estamos para celebrar y festejar este tipo de situaciones, porque la violencia y lo digo a toro pasado que no deja nada de cosas buenas.