Cincinnati viene de atrás, pero Juárez celebró en los penales

En un duelo cargado de tensión, emociones y giros imprevistos, FC Juárez logró salir airoso del TQL Stadium de Cincinnati, luego de igualar 2-2 ante el equipo local y llevarse el punto extra en la definición por penales, correspondiente a la jornada 2 de la Leagues Cup 2025. Aunque los estadounidenses reaccionaron en la segunda mitad, los fronterizos supieron resistir y mostraron mayor temple en la instancia decisiva.

El calor de Ohio no mermó la intensidad sobre el césped. Desde los primeros compases, el conjunto dirigido por Pat Noonan buscó imponer condiciones a través de la tenencia del esférico, sin embargo, el orden de los pupilos de Martín Varini neutralizó cualquier intento por generar peligro real.

Fue el cuadro mexicano el que encontró recompensa a su disciplina táctica al minuto 39, cuando una jugada a balón parado desde el flanco derecho, encontró la cabeza de Ricardinho en el corazón del área. El lusitano se adelantó a su marcador y colocó el balón junto al poste izquierdo, lo que dejó sin opciones al guardameta local.

Al filo del descanso, una acción polémica encendió a la tribuna. El árbitro Alyssa Nichols, tras revisar en el VAR, determinó no sancionar un posible penalti a favor del cuadro de casa, decisión que desató la inconformidad del público en las gradas y el cuerpo técnico de Cincinnati en la zona técnica.

Ya en la segunda mitad, Bravos pareció sentenciar el duelo. Al 63’, Guilherme Castilho aprovechó un rebote en el área para disparar con potencia a la altura del manchón penal y ampliar la ventaja para los suyos. El balón ingresó pegado al poste izquierdo, idéntico al primero, pero con una ejecución más frontal y seca.

No obstante, la reacción del equipo de la MLS no se hizo esperar. Al 71’, una prolongada posesión terminó en los botines del brasileño Evander, quien soltó un derechazo desde tres cuartos de cancha. El esférico se coló al lado izquierdo del arco defendido por el guardameta juarense y revivió las esperanzas del conjunto anfitrión.

Seis minutos más tarde, el empate llegó en una jugada accidentada. Un tiro de esquina ejecutado con fuerza fue mal desviado por el colombiano Óscar Estupiñán, quien intentó despejar de cabeza, pero consiguió todo lo contrario y envió la pelota dentro de su propia portería. El autogol dejó todo nivelado y obligó a definir la batalla desde los once pasos.

Desde el manchón penal, la historia favoreció a los visitantes. Los ejecutores de Juárez, con paso firme y seguridad, acertaron en cuatro de sus cinco intentos. Solo Jairo Torres falló, al encontrarse con la atajada del arquero. Por parte de Cincinnati, Matthew Miazga y Evander no lograron convertir, ambos detenidos por el cancerbero rival.

Finalmente, con los cartones decisivos y el punto extra incluido, Juárez se colocó cerca de la cima del sector correspondiente a la Liga MX, con cinco unidades tras dos presentaciones. Por su parte, Cincinnati, alcanzó apenas tres puntos y se posicionó en el duodécimo lugar entre los equipos de la MLS.

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