Autos

Reseña de manejo del Acura ADX: El SUV que desafía a BMW y Audi

El ya de por sí competido segmento de los SUV compactos premium en México recibe a un jugador que promete dar mucho de qué hablar

Foto: Acura
Luis Hernández del Arco
Actualizado a

Hoy en día, el panorama automotriz mexicano, particularmente en el nicho de los SUV compactos premium, se ha puesto todavía más interesante. Justo antes de cerrar el primer trimestre de 2025, Acura movió sus fichas estratégicamente y presentó el ADX, una camioneta que llega con la clara intención no solo de ampliar la gama, sino de redefinir lo que espera de un modelo de entrada al mundo del lujo.

Y es que, siendo sinceros, el segmento está que arde, con propuestas muy consolidadas, por lo que irrumpir requiere algo más que un buen diseño y un nivel de equipamiento bien logrado.

Así, este ADX representa la apuesta más fresca de la marca de lujo de Honda y, de manera muy significativa, se posiciona como la puerta de acceso a la gama SUV de Acura, ubicándose por debajo de sus hermanas mayores, la RDX y la MDX.

Quizás uno de sus mayores ganchos iniciales, y vaya que es un buen gancho, es su precio: por debajo del millón de pesos, un umbral psicológico importante para muchos compradores. Encima, lleva con orgullo el sello “Hecho en México”, un factor que añade una capa de conexión local y relevancia para el mercado nacional.

Desde que se empezaron a escuchar los primeros rumores sobre su llegada, la expectativa ha ido creciendo. ¿La razón? Acura parece haber encontrado una fórmula interesante: atraer a ese público joven que busca dar el salto a su primer vehículo premium.

Ese comprador que anhela un diseño atractivo, tecnología de punta y un desempeño que emocione, pero que, al mismo tiempo, es consciente de su presupuesto y busca un valor real por su dinero.

Reseña de manejo del Acura ADX: El SUV que desafía a BMW y Audi
Foto: Acura

Más allá de un nuevo modelo

Cuando uno se acerca al Acura ADX 2025, percibe que la marca no se anduvo con rodeos. No estamos ante un simple ejercicio de llenar un hueco en el portafolio. Al contrario, se siente un esfuerzo consciente por dotar a este SUV compacto de atributos que, habitualmente, encontraríamos en escalones superiores o en versiones tope de gama de otros competidores.

Una jugada inteligente es la configuración de sus versiones. Incluso la opción de entrada, denominada ADX Advance, ya viene cargada con un nivel de equipamiento que sorprende gratamente. Podríamos decir que es la opción ideal para quien prioriza la experiencia premium y la funcionalidad sin necesidad de todos los aditamentos estéticos deportivos.

Luego, para aquellos con un espíritu más dinámico, está la variante ADX A-Spec. Aquí es donde el carácter del ADX se acentúa visualmente: detalles exteriores en negro brillante que contrastan con la carrocería, rines de 19 pulgadas con un diseño exclusivo y, al abrir la puerta, un interior que te recibe con inserciones de gamuza y costuras rojas que gritan deportividad. Son detalles, sí, pero detalles que marcan una diferencia palpable en la percepción del vehículo.

Ahora, hablemos de tecnología, porque en pleno 2025, es un pilar fundamental. De serie, en ambas versiones, el ADX nos ofrece una pantalla táctil central de 9 pulgadas. Su funcionamiento es intuitivo y, lo más importante, cuenta con compatibilidad inalámbrica para Apple CarPlay y Android Auto.

Reseña de manejo del Acura ADX: El SUV que desafía a BMW y Audi
Foto: Acura

Complementando esto, encontramos un cargador inalámbrico para smartphones, la posibilidad de crear un “hotspot” Wi-Fi y un sistema de sonido premium firmado por Bang & Olufsen con nada menos que 15 bocinas. Otro punto a favor es la integración de Google built-in 5, facilitando la navegación y el acceso a aplicaciones directamente desde el sistema del coche.

Y el confort, ¿qué tal? Acura sabe que la experiencia premium no solo se vive a través de la tecnología, sino también del bienestar a bordo. Por ello, el ADX no escatima. Un techo panorámico que inunda de luz el habitáculo y cuenta con quemacocos eléctrico es estándar. Los asientos delanteros no solo son calefactables, también ventilados. Algo que se agradece enormemente en climas variados como el nuestro.

Sumemos a esto un climatizador automático de doble zona y salidas de aire acondicionado para las plazas traseras. Son estos detalles los que elevan la calidad de cada viaje, ya sea un trayecto corto en la ciudad o una escapada de fin de semana.

Un motor turbo y tracción inteligente

Aquí es donde el ADX marca una distancia considerable respecto a su primo hermano de plataforma, el Honda HR-V. Mientras comparten estructura básica, la experiencia de manejo es otro cantar.

Para ello, el ADX toma prestado el motor del Integra, un bloque de 1.5 litros turboalimentado que genera 190 caballos de fuerza y 179 libras-pie de torque. Sobre el papel, son cifras respetables para su tamaño y peso. En la práctica, se traducen en una respuesta ágil desde bajas revoluciones, permitiendo incorporaciones y rebases con soltura.

Este potencia se gestiona a través de una transmisión continuamente variable, o CVT. Sabemos que este tipo de cajas a veces generan opiniones divididas, pero Acura ha trabajado para que su funcionamiento sea suave y eficiente.

Para quienes buscan una sensación un poco más conectada, incluye paletas de cambio detrás del volante que permiten simular cambios de marcha. Un detalle interesante es que, para el mercado mexicano, el ADX llega de serie con el sistema de tracción integral (AWD) de Acura. Esto no solo aporta un plus de seguridad en condiciones de baja adherencia (lluvia, caminos de terracería ligera), sino que también contribuye a una mejor distribución del torque al salir de curvas, brindando mayor confianza al conductor.

Para adaptar el comportamiento del vehículo a distintas situaciones o preferencias, contamos con un selector de modos de manejo. Podemos elegir entre Nieve, Normal, Confort, Individual (personalizable) y Sport.

Cada modo ajusta parámetros como la respuesta del acelerador, la gestión de la transmisión y, potencialmente, la firmeza de la dirección, permitiendo así optimizar la tracción, la eficiencia o la deportividad según lo requiera el momento.

Reseña de manejo del Acura ADX: El SUV que desafía a BMW y Audi
Foto: Acura

Sensaciones al volante

Una vez en movimiento, el Acura ADX transmite una sensación de solidez. La puesta a punto de la suspensión logra un buen equilibrio entre confort y control. Filtra adecuadamente las irregularidades del asfalto, algo crucial en muchas de nuestras calles, sin llegar a sentirse excesivamente blanda o propensa a balanceos en curvas. La dirección es precisa, con un peso adecuado que inspira confianza tanto en maniobras a baja velocidad como en carretera.

El motor turbo responde con prontitud, sin un retraso (turbo lag) demasiado perceptible. La entrega de potencia es lineal y progresiva, haciendo que la conducción sea placentera y relajada en el tráfico urbano, pero también ofreciendo suficiente empuje cuando se le exige en carretera.

La transmisión CVT hace bien su trabajo en mantener el motor en el rango óptimo de revoluciones para la eficiencia, aunque es cierto que, en el modo Sport y usando las paletas, la simulación de cambios no replica la inmediatez de una caja automática tradicional o de doble embrague. Así y todo, para el propósito general del vehículo -un SUV premium versátil y agradable de conducir-, el conjunto mecánico resulta muy competente.

La tracción integral aporta ese extra de aplomo, especialmente en superficies resbaladizas o al acelerar a fondo desde parado. No convierte al ADX en un todoterreno puro, claro está, pero sí incrementa la sensación de seguridad y control en una variedad más amplia de condiciones.

Reseña de manejo del Acura ADX: El SUV que desafía a BMW y Audi
Foto: Acura

¿Es el ADX la compra inteligente en su segmento?

Llegamos al punto crucial: ¿vale la pena considerar seriamente el Acura ADX 2025? La respuesta corta es un rotundo sí, especialmente si valoramos la relación costo-beneficio. Por un precio que arranca justo por debajo de los 900,000 pesos, Acura pone sobre la mesa un SUV con un diseño moderno y distintivo (especialmente en la versión A-Spec), un interior repleto de tecnología útil y deseable, materiales de buena calidad, un nivel de confort notable y un equipamiento de seguridad activa completísimo de serie.

Ahora bien, no podemos ignorar el contexto. El ADX entra a competir en un terreno donde gigantes como el BMW X1, el Audi Q3 y el Lexus NX tienen una presencia muy fuerte y una reputación construida a lo largo de años. Estos rivales pueden ofrecer, en algunas de sus versiones, motorizaciones más potentes, quizás una dinámica de conducción un punto más deportiva (en el caso de los alemanes) o una percepción de lujo y refinamiento ligeramente superior (en el caso de Lexus).

Noticias relacionadas

Sin embargo, el ADX juega sus cartas con maestría. Su propuesta de valor es difícil de batir. Mientras que para alcanzar un nivel de equipamiento similar en sus competidores usualmente hay que escalar a versiones más costosas o añadir paquetes opcionales, el ADX lo ofrece prácticamente todo desde el inicio.

Para el comprador que busca maximizar su inversión, obtener la mayor cantidad de tecnología, seguridad y confort por su dinero, sin sacrificar un manejo ágil y agradable, el ADX se perfila como una opción sumamente lógica y atractiva.

Etiquetado en:

Comentarios
Normas

Rellene su nombre y apellidos para comentar

Tu opinión se publicará con nombres y apellidos

Te recomendamos en Motor