Autos

¿Por qué los autos llevan el tanque de gasolina atrás y no junto al motor?

Aunque parezca un detalle menor, la posición del tanque de combustible responde a razones de seguridad, eficiencia y diseño.

Luis Hernández del Arco
ldelarco

Al pensar en el diseño de un automóvil, es fácil enfocarse en lo más evidente: la forma de la carrocería, el tamaño del motor o los detalles interiores. Sin embargo, hay un elemento vital para el funcionamiento de los vehículos de combustión interna que no siempre recibe tanta atención: el tanque de gasolina.

Y es que, la mayoría de los autos colocan el motor en la parte frontal y el tanque de gasolina en la parte trasera, una disposición que muchos dan por sentada.

Pero, ¿Por qué no se coloca el tanque junto al motor para facilitar el acceso al combustible y que el sistema de conexión sea más corto?

Seguridad ante todo

Empecemos. Es evidente que el diseño de un automóvil se rige por muchas normas, pero una de las más importantes es la seguridad. Colocar el tanque de gasolina en la parte trasera responde a una de las máximas fundamentales de la ingeniería automotriz: alejar los componentes peligrosos de las zonas más propensas a sufrir daños en caso de un accidente.

Si el tanque de gasolina estuviera ubicado en la parte frontal del automóvil, correría el riesgo de dañarse durante una colisión frontal, lo que podría provocar incendios o explosiones debido a la cercanía con el motor caliente y otros componentes inflamables.

Estudios de seguridad han demostrado que las colisiones frontales son las más comunes y suelen tener consecuencias más graves que los choques traseros. En un accidente frontal, la energía del impacto se concentra en la parte delantera del vehículo, lo que podría perforar un tanque de gasolina si estuviera ubicado allí.

Así que al ubicarlo en la parte trasera, se reduce el riesgo de una catástrofe en estos escenarios. Incluso en colisiones traseras, el tanque está diseñado para resistir daños y proteger al combustible de fugas peligrosas.

Foto: Cortesía Freepik

Balance y distribución de peso

Otro factor crucial en la ubicación del tanque de gasolina es el balance del automóvil. Un coche, como cualquier otro objeto en movimiento, sigue las leyes de la física. Por ello, la distribución del peso tiene un impacto significativo en su manejo y estabilidad.

Comúnmente, los autos modernos tienen tracción en las ruedas delanteras, lo que significa que el peso del motor y la transmisión ya están concentrados en esa área. Si además se ubicara el tanque de gasolina en la parte frontal, se sobrecargaría el eje delantero, afectando la capacidad de maniobra y el comportamiento del vehículo en las curvas.

Al colocar el tanque en la parte trasera, se distribuye mejor el peso total del automóvil, lo que ayuda a mantener el equilibrio entre la parte delantera y la trasera. Esto también mejora la tracción, ya que el peso del combustible en la parte trasera puede ayudar a que las ruedas traseras mantengan contacto con la carretera, especialmente en condiciones adversas como la lluvia o el hielo.

Espacio y diseño

Aparte del rendimiento y la seguridad, también debe ser práctico. Por ello, los ingenieros automotrices deben aprovechar al máximo el espacio disponible en el chasis del auto. Colocar el tanque de gasolina en la parte trasera libera espacio en la parte delantera para el motor, la transmisión y otros componentes mecánicos esenciales.

En un auto de combustión interna, el motor y el sistema de escape ocupan una gran cantidad de espacio en la parte delantera, por lo que ubicar el tanque de gasolina allí podría complicar el diseño.

De esta forma, el tanque debe estar ubicado en una zona lo suficientemente baja para que la bomba de combustible funcione correctamente y para mantener un centro de gravedad adecuado, lo que mejora la estabilidad del vehículo.

Al no estar tan cargada de componentes mecánicos, la parte trasera del automóvil resulta un lugar ideal para albergar el tanque de combustible. En muchos diseños, el tanque se coloca debajo de la cajuela o en el área entre el área de carga y el habitáculo, lo que maximiza el uso del espacio disponible sin comprometer la comodidad o la seguridad de los pasajeros.

Foto: Cortesía Freepik

Eficiencia del combustible

Aunque pueda parecer un detalle menor, la ubicación del tanque de gasolina también influye en la eficiencia del sistema de combustible. En muchos autos, el combustible es transportado desde el tanque hacia el motor mediante bombas de alta presión.

De hecho, la distancia entre el tanque y el motor no es un problema significativo, ya que las bombas modernas son capaces de suministrar el combustible con rapidez y precisión, pero mantener una distancia entre ambos componentes ayuda a reducir el riesgo de sobrecalentamiento del combustible.

Al estar el tanque alejado del calor generado por el motor, se evita que el combustible se caliente en exceso, lo que podría afectar su eficiencia o provocar evaporaciones. Esta separación también ayuda a mantener la integridad de los conductos de combustible, que podrían sufrir daños si estuvieran expuestos a las altas temperaturas del motor.

Innovaciones y excepciones

Aunque la disposición tradicional ubica el motor en la parte delantera y el tanque de gasolina en la trasera, existen excepciones notables. Algunos autos deportivos, por ejemplo, tienen el motor en la parte trasera o en el centro, lo que lleva a colocar el tanque de gasolina en posiciones diferentes para mantener el balance.

Estos vehículos están diseñados con un enfoque en el rendimiento y el manejo en pista, por lo que su distribución de peso y diseño se ajustan a las necesidades específicas de este tipo de conducción.

En autos como el Porsche 911, por ejemplo, el motor está en la parte trasera, mientras que el tanque de gasolina se ubica en la parte delantera, lo que permite una distribución óptima del peso y mejora la aerodinámica. Sin embargo, estos casos son excepcionales y están más orientados a maximizar el rendimiento en lugar de la funcionalidad diaria.