Por qué el litio y las tierras raras tomarán la misma importancia que el petróleo en la industria del automóvil

Mientras que con los autos de motor de combustión interna existe una dependencia de combustibles fósiles (gasolina y diésel), con los vehículos no solo se recurre a la energía eléctrica (mucha de ella proveniente de centrales termoeléctricas requiere combustibles fósiles como petróleo, gas natural, carbón, madera y núcleos de uranio), sino también al litio, cobalto y a las tierras raras.

En tanto que el litio y cobalto es empleado para las baterías del sistema eléctrico de los autos, las tierras raras están experimentando una demanda creciente a medida que se utilizan en muchos aspectos de la transición hacia la energía verde y la vida moderna.

Pese a que no son tan ampliamente reconocidos como el litio o el cobalto, estos elementos también son cruciales y, sin ellos, muchas tecnologías modernas que se dan por sentadas simplemente no existirían.

Los autos eléctricos dispararon la demanda

Primordialmente, las tierras raras consisten en 17 elementos que se encuentran en la tabla periódica. Deben extraerse y, a menudo, se encuentran agrupados en depósitos geológicos.

Hoy por hoy, algunos fabricantes de autos eléctricos utilizan el neodimio y el praseodimio en los motores de imanes permanentes. A su vez, ciertos proveedores como es el caso de Panasonic imanes de neodimio en su sistema portátil de bocinas inmersivos para juegos.

En el caso de los recursos naturales como el litio y el cobalto, se han hecho sumamente codiciados, al grado que el aumento de la demanda ha conducido a la escasez, lo que hace que los precios se disparen.

Adicionalmente, los precios elevados también conducen a nuevas formas innovadoras de trabajar, desde métodos de extracción avanzados hasta un uso más eficiente del recurso, fomentando la competencia.

Lo que viene a futuro

Dado que ha aumentado la adopción de vehículos eléctricos, también han aparecido innovaciones en la producción de baterías de litio. Por ejemplo, Toyota lidera el camino en la producción de baterías de estado sólido con más de 1,000 patentes. Eso es más que cualquier otro fabricante de automóviles.

En líneas generales, las baterías de estado sólido consisten en electrolitos sólidos en lugar de líquidos, con lo que se logra una mayor autonomía y un menos tiempo de recarga.

De su parte, Tesla no cambia la tecnología tradicional de iones de litio, no obstante, también está realizando cambios en la forma en que pone en marcha las baterías. En consecuencia, comenzará a usar baterías de fosfato de hierro y litio en sus vehículos de gama estándar, eliminando también la necesidad de cobalto.

Por más que la innovación es evidente en el mercado más amplio del litio y el cobalto, aún no se ha convertido en un problema en las tierras raras. De hecho, el precio de las tierras raras tendría que aumentar exponencialmente antes de que los exploradores y productores vieran la innovación como un motivo de preocupación.

En este apartado, Defense Metals, una empresa de exploración y desarrollo de minerales que opera en el espacio de las tierras raras, tiene una clara ventaja competitiva, ya que su depósito de Wicheeda tiene el potencial de convertirse en un productor de importancia mundial.

Esta compañía prevé una producción de aproximadamente 25,000 toneladas anualmente hasta 2038, esto es el 10 por ciento de la producción mundial actual. Poniendo esto en perspectiva, la producción actual de neodimio y praseodimio de tierras raras tendrá que crecer un 100 por ciento en los próximos 10 años solo para adaptarse a las estimaciones de producción de vehículos eléctricos.

Todo parece que serán igual o más solicitados que el petróleo

Pero bueno, esas son solamente las cifras de autos eléctricos, ya que las tierras raras también son necesarias para generar energía renovable; entonces, para satisfacer esta creciente demanda de varios sectores, la producción global debe aumentar mucho más rápido si espera mantenerse al día.