Los autos usados que se convertirán en una inversión
Estos vehículos se convertirán en clásicos sumamente codiciados.
Es un hecho que cada día las cosas están más caras y los autos no son las excepción. En la actualidad, esta subida de precios se nota más en los autos nuevos, sin embargo, al salir del distribuidor pierden su valor.
No obstante, si lo que se busca es hacer dinero con la compra de un auto, entonces lo que se debe hacer es adquirir un vehículo clásico o antiguo. Actualmente, los precios de esta tipo de automóviles también están por las nubes, así que lo que se debe hacer es pensar a futuro.
Pensando en hacer un buen negocio con vísperas a que el vehículo suba de valor de manera notoria, cada año Hagerty hace una selección con los autos que un futuro se convertirán en clásicos sumamente codiciados.
Pero ¿qué elementos son los que pueden caracterizar a un futuro auto clásico? ¿son caballos de fuerza? ¿el diseño innovador? ¿su producción limitada o el costo de compra exorbitante? Probablemente una combinación de estos.
Según Hagerty, estos son los 10 autos que se deben comprar en 2023, antes de que se sus precios se disparen:
Saab 900 Turbo 1985-1993
Este auto se ofrecía en estilos de carrocería de tres y cinco puertas, por su parte, la potencia base provino de un cuatro cilindros en línea de 2.0 litros con inyección de combustible diseñado originalmente por Triumph.
Sus 115 caballos de fuerza en las ruedas delanteras a través de una transmisión manual de cuatro velocidades (cinco posteriores a 1983) o automática opcional. Un turbocompresor estuvo disponible desde el principio, con 135 caballos de fuerza.
Suzuki Cappuccino 1991-1998
Este auto fue un destello de bajo volumen construido exclusivamente para el segmento de miniautos de Japón. Se vendió en la década de 1990 contra el Honda Beat de motor central y el Autozam (Mazda) AZ-1 con puertas de ala de gaviota.
Su tamaño estaba justo dentro de los estándares de los kei cars, pero era más corto y casi más angosto que el Miata. Además, en lugar de lona, el techo de Suzuki está compuesto por tres paneles de aluminio removibles y una barra targa que se puede plegar dentro de la carrocería. Así, el Cappuccino puede ser un cupé, un convertible, un targa o un roadster completo.
AMC AMX 1968-1970
Este AMX (American Motors eXperimental) recibió luz verde en septiembre de 1966, con un estilo derivado del auto de exhibición AMX I. Sus proporciones hacen que el AMX se vea más como un Hot Wheels que como un auto de producción.
Para perder el asiento trasero, se redujo la carrocería del Javelin, lo que le dio una distancia entre ejes más corta. Por su parte, el interior del AMX era el mismo que el del Javelin SST.
En tanto que las opciones de motor, a diferencia del Javelin, eran únicamente V8, con diferentes cilindradas, todas combinadas con una palanca de cuatro velocidades o una automática.
Durante los tres años de producción de AMX de dos asientos, solo se construyeron 19,134 unidades; el mejor año de ventas fue en 1969, el primer año completo de AMX, con 8,293 unidades saliendo de los distribuidores.
Mercedes-Benz SLR McLaren 2004-2010
A fines de la década de 1990, Mercedes-Benz albergaba grandes visiones de un moderno coupé 300 SLR Uhlenhaut, con largas dimensiones de GT y suficiente potencia para destrozar el espacio-tiempo.
Su socio de desarrollo y carreras McLaren tenía otros planes: el segundo automóvil de producción del diseñador Gordon Murray, quería que el próximo Merc-Laren fuera un superdeportivo McLaren ligero, de aspiración natural, con motor central y corazón de Mercedes. Al final, el resultado fue un auto GT cuya personalidad no es ni Mercedes ni McLaren, a pesar del gran esfuerzo de ambos lados.
McLaren construyó el automóvil en torno a lo que Mercedes afirma que es el primer monocasco completamente de fibra de carbono en un automóvil de producción, con una carrocería completamente de carbono que ahorró peso sobre el equivalente en acero.
En específico, el SLR con una producción limitada de 3,500 unidades, produce 617 caballos de fuerza y 575 libras-pie de torque.
Toyota Pickup 4x4 SR5
Para cuando la segunda generación de la Hilux llegó a los concesionarios en 1984, la reputación de Toyota de crear camionetas pequeñas de calidad se había consolidado. Gran parte de las partes mecánicas de la nueva Pickup, como el legendariamente confiable motor 22R 2.4 litros de cuatro cilindros, la suspensión sólida del eje delantero y la caja de transferencia, se heredaron de la generación anterior.
Sin embargo, la pickup de segunda generación lució una chapa metálica más agresiva, repleta de salpicaderas más anchas, faros cuadrados y una parrilla contemporánea. De todas las versiones, la más solicitada es la de tracción en las cuatro ruedas con el paquete SR5. En 1988, el último año de producción de la camioneta, Toyota abandonó el motor turbo de primera línea por un V6 de 3.0 litros. Al final de su ciclo de producción, Toyota había movido más de 1.5 millones de sus pickups de segunda generación solo en América del Norte.
Lamborghini Murciélago 2001-2010
Este súper auto era descendiente del Diablo, Countach y Miura, lo que significa que había grandes expectativas cuando se lanzó en 2001. Con 571 caballos de fuerza de un V12 de 6.2 litros, este auto destacaba por su diseño con puertas de tijera, tomas de aire.
A medida que la producción continuó a lo largo de la década de 2000, Lamborghini siguió modificando el Murciélago introduciendo variantes como el roadster, la Edición 40 Aniversario o el LP640.
Nissan 350Z 2003-2008
Este auto catalogado como una recreación del Datsun 240Z que arrasó en el segmento y que puso de cabeza al mundo de los autos deportivos en 1970, destaca por su desempeño proveniente de una motor V6 de 3.5 litros productor de 287 caballos de fuerza.
Incluso tuvo una versión NIsmo que destacaba por tener un mayor desempeño, una imagen más llamativa y un rendimiento nítido en la pista.