Lío en Red Bull; actitudes de Helmut Marko hartan al personal
Miembros de la escudería están molesto por las actitudes de Helmut Marko y Oliver Mintzlaff.
Tensión y desconcierto se viven en los pasillos de Milton Keynes. Red Bull vive una crisis que desencadenó en el despido de Christian Horner tras 20 años como director del equipo. A la interna el ambiente no es nada bueno, así lo reporta la prensa británica quienes señalan que las actitudes de Helmut Marko, asesor del equipo y Oliver Minztlaff, director ejecutivo de la marca, no caen del todo bien entre el personal.
The Sun platicó con distintos empleados de Red Bull, quienes revelaron lo qué sucedió en las oficinas de Milton Keynes tras la destitución de Horner. De acuerdo a las versiones, el ambiente es de tristeza, mientras que Helmut Marko ordenó cambiar los semblantes por sonrisas, lo que cayó muy mal de puertas para adentro.
“Sólo había pasado un día desde que Christian fue despedido y gran parte del equipo todavía estaba molesto cuando el Sr. Marko se dirigió a nosotros. Pero él se lo tomó a broma y nos dijo que nos animáramos, que teníamos que sonreír más. Eso no le cayó bien a nadie, porque ¿qué hay que sonreír?” señalan.
El lío no se queda ahí. A pesar de que Laurent Mekies fue presentando como nuevo director de Red Bull, la propia fuente asegura que quienes tienen el verdadero control son Marko y Mintzlaff. El mismo Mintzlaff también bromeó con la salida de Horner.
“Mintzlaff también dijo: ‘Si tenéis algún problema, envía un mensaje a tú superior directo’. Luego añadió: ‘Ah, y si ya no tienes superior directo, ¡enviámelo a mí!’, y se echó a reír” cuenta un miembro del equipo.
Así fue despedido Horner
La fuente apunta que Horner fue citado a una junta en Londres el pasado 9 de julio. El directivo no se olía lo que venía. “Simplemente le dijeron: ‘Tienes que estar allí’ y se quedó estupefacto cuando lo llevaron a una habitación y lo despidieron en el acto. Lo dejó totalmente sorprendido: pensó que lo habían llamado para hablar sobre otro tema.”
Tras esto, Horner se siente traicionado y tal es la lealtad que le tienen sus ahora ex empleados, que incluso ya se llega especular que muchos quieren irse de Red Bull. “Casi todos los empleados son británicos y le son ferozmente leales y ahora están hablando de irse. Fue un ataque dirigido al control del equipo de carreras porque a la sede austriaca de Red Bull no le gustaba que un británico dirigiera su equipo de carreras” señalan
Comienza la vida sin Horner
El cese de Horner transcurría en un breve descanso que tuvo la Fórmula 1. Tras el GP de Gran Bretaña, la actividad paró por dos semanas y este 25 de julio será cuando la máxima categoría vuelva con las acciones del GP de Bélgica.
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