Ford GTBC: El hub de ingeniería que revoluciona la industria automotriz

Desde su llegada a México hace casi un siglo, Ford Motor Company ha demostrado un compromiso claro en términos de producción automotriz y también con el desarrollo social, la educación, el empleo y el medio ambiente.

Este compromiso se ha materializado de manera contundente en el Centro Global de Tecnología y Negocios (GTBC), ubicado en Naucalpan, Estado de México. Este centro es un campus corporativo moderno que alberga uno de los mayores centros de ingeniería en América Latina, un auténtico bastión de innovación y talento mexicano.

Solo para tener una idea de la dimensión de este GTBC, es que tiene capacidad para más de 9,000 colaboradores bajo un esquema de trabajo híbrido, lo que permite a Ford adaptarse a las nuevas realidades laborales y ofrecer un ambiente de trabajo flexible.

Más allá de la capacidad, lo que realmente destaca de este centro es su enfoque en el bienestar de sus trabajadores. Estas instalaciones cuentan con servicios de primer nivel, como gimnasio, cafeterías, servicio médico, y hasta salones de belleza y canchas deportivas. Todo esto busca mantener un equilibrio saludable entre la vida profesional y personal de quienes forman parte del GTBC.

Algo que también es destacable de este centro es que es uno de los motores de innovación y desarrollo más importantes dentro de la estructura global de Ford. Con un enfoque claro en la tecnología y los negocios, desde estas instalaciones se gestionan importantes áreas operativas de la compañía.

Un dato clave es que el 23% de las compras globales de Ford se gestionan desde este centro en México, lo que significa que cada mes se adquieren aproximadamente 78 millones de piezas que son utilizadas en la fabricación de vehículos en todo el mundo.

Aunado a ello, el área de recursos humanos global de la empresa tiene su base operativa en estas instalaciones, lo que subraya aún más la relevancia del GTBC en la estructura global de Ford.

Sin embargo, lo más relevante del GTBC es su papel como un hub de ingeniería, donde se concentra un vasto talento mexicano. En total, más de 3,000 ingenieros, la mayoría de ellos mexicanos, están involucrados en la planificación, investigación y desarrollo de vehículos, así como en la creación de los cientos de componentes que los conforman.

Es tal la magnitud del trabajo, que este GTBC participa en ocho de cada 10 programas internacionales de Ford, lo que lo convierte en una pieza clave dentro de la compañía a nivel global.

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Todos los ingenieros mexicanos están involucrados en estos proyectos, sino que lideran una parte significativa de los mismos. De hecho, hasta 600 ingenieros pueden trabajar simultáneamente en un solo proyecto.

Este impacto de la ingeniería mexicana se extiende a todo tipo de vehículos, desde SUVs como la Bronco Sport, hasta innovaciones tecnológicas como la Ford F-150 Lightning, la primera pickup eléctrica de la compañía. En modelos como la Lincoln Navigator y la Ford Expedition, los ingenieros del GTBC han ejecutado el 70% de la ingeniería. Este tipo de vehículos no solo se destacan por su tecnología de punta, sino también por el cuidado con el que se desarrollan en cada etapa del proceso.

Además de su participación en el diseño y desarrollo de vehículos, los ingenieros del GTBC han generado más de 500 patentes registradas ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), y cuentan con más de 4,700 ideas en proceso de registro.

Esto habla del nivel de innovación y creatividad que fluye constantemente en este centro. Aunado a ello, estos equipos han mejorado casi 500 procesos globales de Ford, lo que demuestra que su impacto va más allá del desarrollo de productos y toca todos los aspectos de la operación de la empresa.

Y bueno, el GTBC no solo se limita a la ingeniería tradicional de vehículos. Este centro también cuenta con 18 laboratorios de pruebas, distribuidos en un área de 22,000 metros cuadrados, equipados con la última tecnología.

Estos laboratorios incluyen cámaras de simulación ambiental, equipos electrodinámicos para pruebas de vibración, escaneo 3D, y robots de última generación. A través de estas instalaciones, se realizan pruebas cruciales en sistemas y componentes electrónicos, materiales, y simulaciones de ambiente vehicular, entre otros. Esto asegura que cada vehículo y componente que sale de Ford cumpla con los más altos estándares de calidad y seguridad.

Queda claro que el talento mexicano es el alma de este centro de innovación. Con más de 2,800 ingenieras e ingenieros distribuidos en áreas como calibración, electrificación, ingeniería asistida por computadora, pruebas y desarrollo, el GTBC se ha convertido en un semillero de ideas y avances tecnológicos. La importancia de este centro para Ford, y para la industria automotriz en general, es innegable.

Es más que evidente que el Centro Global de Tecnología y Negocios de Ford en México no es solo un espacio físico lleno de instalaciones de vanguardia. Es el reflejo del compromiso de Ford con el talento mexicano y la innovación.

Los ingenieros que trabajan en estas instalaciones están a la vanguardia de la industria automotriz global, desarrollando tecnología que impulsa a la compañía hacia el futuro y reafirma la importancia de México en el panorama automotriz internacional.

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