Autos

Este Aston Martin fue un regalo de cumpleaños de la Reina Isabel II al Rey Carlos III

Este que fue uno de los primeros autos del hoy monarca es invaluable en todos los sentidos.

Luis Hernández del Arco
ldelarco
Ciudad de México

Desde que se inventó el automóvil, la familia real británica ha tenido una enorme cantidad de vehículos para uso exclusivo de cada uno de los miembros. En la actualidad, la flota de autos y camionetas es sumamente extensa: algunos los pueden usar cualquiera de los miembros del reinado, mientras que otros exclusivos de quien esté en el trono.

Por ejemplo, el ahora Rey Carlos III que sucede a su fallecida madre la Reina Isabel II, tiene a su disposición una serie de limusinas y autos modificados, mismos que son utilizados según lo dictan los protocolos.

Ahora bien, de todos los autos oficiales y no oficiales que posee el sucesor de la corona británica, existe uno que es sumamente especial para él, se trata de un Aston Martin DB6 Volante. Este auto convertible es invaluable, sobre todo el valor estimativo, ya que fue un obsequió de la Reina Isabel a Carlos por haber cumplido la mayoría de edad en 1970.

Desde entonces, el auto ha estado en posesión del Rey Carlos, lo que quiere decir que este Aston Martin sobrepasa los 50 años de antigüedad. Pero además de ser sumamente especial por ser el regalo de su madre cuando cumplió 21 años, al tiempo, este convertible recibió una serie de modificaciones en el motor para ser único en su especie.

¿Qué hace especial a este Aston Martin?

Por extraño que se lea, en lugar de gasolina, el motor de este DB6 Volante funciona con excedentes de vino no apto para el consumo humano y suero de leche, un subproducto de la fabricación de queso. Lo anterior se debe a que el seis cilindros de 4.0 litros fue modificado para funcionar con bioetanol, que en este caso es producido por una empresa británica que aprovecha los residuos orgánicos para convertirlos en combustible.

Este combustible conocido como bioetanol “E85″ -añade un 15 por ciento de gasolina sin plomo-, no solo es ecológico, sino que también registra más potencia -originalmente son 286 caballos de fuerza-, ya que tiene mayor octanaje (105 frente a los 87 más típicos de la gasolina sin plomo).

Otro hecho relevante de este Aston Martin DB6 Volante, es que el Rey Carlos III contrató como instructor al piloto británico dos veces campeón de la Fórmula 1, Graham Hill, para que le enseñara a manejar de manera perfecta su regalo de cumpleaños en un autódromo de Thruxton.

Por todo lo anterior, se puede decir que este Aston Martin convertible del actual monarca del Reino Unido es quizás uno de los vehículos británicos más famosos que existen en el mundo.