Autos

Bianchet B 1.618 Grande Date Sapphire: el Bugatti de los relojes

Es una obra maestra de la relojería que combina la innovación técnica con la estética más refinada.

Luis Hernández del Arco
ldelarco

En el mundo de la alta relojería, pocos nombres logran capturar la imaginación de los conocedores como lo hace Bianchet. Esta marca suiza, conocida por sus innovadores relojes tourbillon, ha presentado recientemente una obra maestra que lleva la exclusividad y la atención al detalle a niveles sin precedentes: la Edición B1.618 Grande Date Sapphire.

Pero, ¿qué hace que este reloj pueda ser considerado el “Bugatti” de los relojes? El vínculo entre los relojes de alta gama y los automóviles de lujo no es nuevo. Ambos son símbolos de estatus, donde el prestigio, la precisión y la perfección técnica son esenciales.

Así como Bugatti produce automóviles que son mucho más que simples máquinas de velocidad -auténticas obras de arte sobre ruedas-, Bianchet crea relojes que no solo indican la hora, sino que encapsulan la esencia de la ingeniería de alta gama y el diseño artístico.

Foto: Cortesía Bianchet

Materiales innovadores: El zafiro y el caucho

En su reciente creación, la Edición B1.618 Grande Date Sapphire, Bianchet se aventura donde pocos relojeros han ido antes, con una caja que combina cristal de zafiro y caucho, una proeza técnica comparable a los avances que Bugatti logra en sus superdeportivos.

Este material, que es el segundo más duro después del diamante, representa un desafío significativo en términos de fabricación y acabado. Sin embargo, al igual que Bugatti perfecciona la aerodinámica en cada uno de sus modelos, Bianchet ha logrado integrar con éxito costuras de caucho en la construcción del reloj, una innovación que realza la estética y la durabilidad del diseño.

Esta fusión pionera de materiales recuerda las decisiones que Bugatti toma al elegir fibras de carbono y otros compuestos avanzados en sus automóviles. Ambos mundos están profundamente inmersos en la búsqueda de la perfección técnica, y tanto en Bugatti como en Bianchet, los materiales no son simplemente funcionales, sino que también aportan una estética única y vanguardista.

Foto: Cortesía Bianchet

Exclusividad en su esplendor

Otra razón por la cual este reloj puede considerarse el “Bugatti” de la alta relojería es la exclusividad. Bugatti produce automóviles en series limitadas, asegurando que cada vehículo no solo sea una maravilla tecnológica, sino también una pieza extremadamente codiciada por coleccionistas.

Del mismo modo, la Edición B1.618 Grande Date Sapphire está limitada a solo 21 piezas. Cada una de ellas es ensamblada a mano en el taller de Bianchet en La Chaux-de-Fonds, Suiza, lo que garantiza que cada reloj sea una creación única, tanto en términos de precisión como de valor artesanal.

Este tipo de exclusividad no es para todos, y ahí radica su atractivo. Así como solo un selecto grupo de personas en el mundo puede tener un Bugatti, lo mismo ocurre con la Edición B1.618 Grande Date Sapphire.

Esto eleva el estatus del reloj a un nivel comparable al de un superdeportivo, donde no se trata solo de poseer un objeto de lujo, sino de ser parte de una élite que valora la distinción y la singularidad.

Foto: Cortesía Bianchet

La arquitectura del movimiento: Un espectáculo de precisión

Así como Bugatti se enorgullece de los motores de alto rendimiento y el diseño impecable de sus vehículos, Bianchet ha desarrollado un movimiento Flying Tourbillon que parece levitar dentro de la caja de zafiro.

Este movimiento, visible gracias a la transparencia del cristal, es un testimonio de la ingeniería avanzada y la precisión que definen a la marca. Toda la construcción del tourbillon se asemeja a un auto Bugatti, donde cada componente está diseñado no solo para ser funcional, sino también para deslumbrar visualmente.

En sí, el tourbillon es uno de los mecanismos más complejos y apreciados en la relojería, capaz de contrarrestar los efectos de la gravedad para mejorar la precisión del reloj. Esto lo convierte en el equivalente mecánico de la ingeniería extrema de Bugatti, donde cada detalle está destinado a maximizar el rendimiento y la precisión.

Inspiración matemática

Un elemento fascinante en la Edición B1.618 Grande Date Sapphire es su diseño basado en la proporción áurea y la secuencia de Fibonacci. Estos principios matemáticos, que han guiado a artistas y arquitectos durante siglos, también forman la base de muchos diseños en la ingeniería automotriz. Bugatti, por ejemplo, se inspira en la simetría y las proporciones perfectas para crear vehículos que son no solo rápidos, sino también bellamente equilibrados.

De manera similar, Bianchet utiliza estas proporciones para crear un reloj que, cuando se observa de cerca, revela una armonía perfecta en su diseño. Esto añade una capa extra de sofisticación intelectual y estética al reloj, convirtiéndolo en una joya tanto para los matemáticos como para los entusiastas de la relojería.

Foto: Cortesía Bianchet

Exclusividad y limitación: Un símbolo de prestigio

Así como el Bugatti Chiron, uno de los modelos más icónicos de la marca, es conocido por ser producido en números extremadamente limitados, con cada unidad meticulosamente personalizada, en el caso de Bianchet, la Edición B1.618 Grande Date Sapphire solo 21 piezas están disponibles en todo el mundo.

Por todo lo que contiene y representa, al tener este reloj no solo se está adquiriendo un instrumento de tiempo de alta precisión, sino también un símbolo de estatus, similar a quienes poseen un Bugatti. Su precio lo dice todo: 1,924,037 pesos.

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.