MINI Cooper S Clubman, a prueba: cuando los hatchbacks o station wagons son mejor opción de compra que un SUV
Este modelo tiene un gran número de atributos y particularidades únicas en comparación con sus rivales.
Entérminos de diseño y tradición, no hay duda que el MINI Cooper es el modelo emblema de la marca de origen británico propiedad de BMW Group.
Pocos autos como este hatchback, pueden combinar deportividad, eficiencia de combustible, lujo y una apariencia que no pasa de moda.
Pero, al tener una carrocería compacta que le permite ser uno de los autos urbanos perfectos y lograr una maniobrabilidad superior sin importar la velocidad, el espacio interior, específicamente en la fila trasera y cajuela.
Debido al reducido volumen de la cabina, el MINI Cooper se convierte prácticamente en un biplaza. Si bien existe una opción de cuatro puertas, la zona de carga sigue siendo limitada cuando se requiere viajar con equipaje.
Ahora bien, si lo que se desea es tener un autoque fusione el estilo del MINI Cooper con el espacio y versatilidad de un station wagon, pero sin que sea un SUV como el Countryman, lo que se debe hacer es recurrir al Clubman.
Lo mejor de dos mundos
Tanto el manejo, el estilo exterior e interior, así como el nivel de equipamiento no se extrañan en nada versus al MINI tradicional. Aunque bueno, el Clubman también tiene una larga tradición, ya que cuando surgió el Mini Cooper en la década de 1960, también existía una variante con un amplio espacio interio r solo que llevaba el nombre de Traveller.
A pesar de ser más largo, el Cooper Clubman tampoco echa de menos la maniobrabilidad y estabilidad que caracteriza al Cooper a secas. Esto se debe a que, a pesar de ser más largo, no deja de ser un automóvil de dimensiones compactas.
Haciendo una comparación de cifras de volumen interior, este modelo de MINI se coloca como uno de los más espaciosos al registrar 360litros en la cajuela y un total de 1,250 litros con la segunda fila replegada.
Único en su segment
Continuando con las comparaciones, el Clubman saca una enorme ventaja contra sus rivales debido a que su estilo no imita o sigue tendencias del mercado automotor. Simplemente en el acceder a la cajuela por medio de dos puertas que se abren a los lados es un gran diferenciador a cualquier hatchback o station wagon que exista en la actualidad.
Lo que sí se extraña, sobre todo de la versión S, es la tracción en las cuatro ruedas, que permite sumar bondades a la dinámica de conducción peculiar de los MINI, aunque bueno esto eleva su precio.
Otras objeciones que se le puede hacer al Clubman es lo complicado que puede llegar a ser el uso del sistema multimedia, así como el mayor consumo de gasolina en comparación con el Cooper Hatchback.
En conclusión
Si se deseasalir completamente de lo convencional cuando se busca un auto de lujo compacto, este MINI Clubman debe ser la opción número uno. Además, considerando el espacio interior y versatilidad es una compra más razonable que una SUV, ya sea del mismo tamaño o precio.