México vence a Honduras y retoma punta del octagonal de Concacaf
Partido redondo de la Selección Mexicana, superior a ‘La H’, que sufrió la expulsión de Maynor Figueroa. El Tri recuperó el liderato del octagonal. Goles de Córdova, Funes Mori y ‘Chucky’.
Cuando el cielo abrió en la Ciudad de México, la Selección Mexicana y su afición se reencontraron a sí mismas. Tarde de reconciliación en el Estadio Azteca; un gol de alivio (Córdova), uno reivindicativo (Funes Mori) y uno orgásmico (Lozano). El ‘Cielito Lindo’ sustituyó al grito prohibido y la espectacular tarde fue una verbena en Santa Úrsula. México, ahora líder del octagonal, encarará el final de la triple jornada eliminatoria con mejores ímpetus con los que durmió el jueves. Goles y triunfos son amores.
‘La H’ se tomó muy en serio aquello de ‘con calma, que nos amanecemos’ en los primeros compases. Desprovisto de Romell Quioto y ‘Choco’ Lozano, dos de sus mayores estiletes, Fabián Coito optó por hacer del cronómetro el sexto defensa en la retaguardia de la ‘Bicolor’. De los primeros 10 minutos, los catrachos se las arreglaron para que discurrieran solo ocho. Cada saque de manos tardó tanto como una movida de ajedrez. Coito había sumergido el partido en litros de sedante hasta que Jiménez pinchó la pelota y Lozano perdió el norte; el rutinario testarazo del ‘Chcuky’ solo se acumuló a los infortunios de los últimos días. López agradeció al templo azteca por el yerro del ídolo.
Lo cierto es que, a pesar de los pasatiempos hondureños y la puntería atrofiada de Lozano, existía una brecha enorme entre las zanjas de Maldonado y Arriaga. Héctor Herrera, mariscal en horas bajas, advirtió el defecto. ‘HH’ imaginó un bellísimo pase sobre líneas, templadito y rupturista; López solo retrasó la definición, a ‘Tecatito’ le faltó una centésima de segundo, Lozano reactivó el rebote, Figueroa despejó con pies de extintor, pero Córdova, quien merodeaba por allí, disparó con lanzallamas para no dejar dudas. La rocambolesca secuencia sosegó al Tricolor, que ahora jugó con placer y musa. La cancha del Azteca se convirtió en el patio de juego de la barbacoa del domingo. Honduras solo defendió en posición fetal, indefenso a las sádicas ráfagas del estelar tridente mexicano. La fantasía de Corona para desaparecer a Acosta, y el seco cabezazo de Jiménez que cimbró el mástil izquierdo de López, confirmaron las sensaciones. Una tarde llevadera en Santa Úrsula. El sol del domingo tuvo propiedades curativas. Eso y las lacerantes inmersiones de Herrera y Córdova en el bloque medio que trazó Coito.
La tarde cayó brillante, majestuosa. Las nubes en ignición se posaron sobre el Coloso cuando Maynor Figueroa desempolvó las hachas y serró las piernas de Raúl Jiménez. Por suerte, la estructura ósea de Raúl es capaz de soportar mayores torturas, como un cabezazo en falso de David Luiz. Un futbolista con menos recorrido (y los pies mejor plantados sobre el césped) ya estaría camino a la sala de urgencias. Elfath, quien ya había dejado impunes los azotes de Pereira al rostro de ‘Chucky’, condenó al ostracismo a Figueroa y el partido degeneró en monólogo. Jiménez, ligeramente maltrecho, se retiró a los aposentos, y el Azteca recibió a Funes Mori con fúnebre música de viento, mientras el Tri atacó por inercia y sin nervio. No fue sino hasta que Lozano exigió que López buscara una pelota en su rincón derecho cuando México recobró el sentido de la misión.
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Funes Mori se alimentó de la hostilidad que su presencia en el campo causó. Cosas de futbolistas. De los buenos. Para ello, Gallardo encontró una vastedad de campos verdes inhóspitos por delante, Edson Álvarez apuntó a una buchaca, pero impactó al madero derecho, y Funes Mori se batió en fiero duelo en lodo con Pereira. El punterazo final infló las redes y las gargantas de 44,992 aficionados. El ciclónico gol de Lozano, quien colgó en la escuadra una devolución exprés de Orbelín, desató el frenesí. La fiesta estaba completa. Nada como una sesión de goles, golazos, raudales de fútbol, sol inclemente y algún susto para obrar una reconciliación duradera. Al menos, que dure tres días, porque El Salvador y el temible Cuscatlán aguardan.
- 13 Ochoa
- 21 Luis Rodríguez
- 15 Héctor Moreno
- 23 Jesús Gallardo
- César Montes
- Francisco Córdova (65')
- 4 Edson Álvarez (76')
- 16 Héctor Herrera
- Raúl Jiménez (66')
- 22 Hirving Lozano (91')
- 17 Jesús Corona (65')
- Banquillo
- 10 Orbelín Pineda (65')
- 8 Carlos Rodríguez
- Ernesto Vega (65')
- 18 Guardado
- Jonathan Orozco
- 7 Luis Romo (76')
- Rogelio Funes Mori (66')
- 1 Talavera
- Osvaldo Rodríguez
- 2 Néstor Araújo
- 20 Carlos Antuna (91')
- Julio Dominguez
- Luis López
- Kevin Álvarez
- Danilo Acosta (45')
- Marcelo Pereira
- Denil Maldonado
- Maynor Figueroa
- Bryan Acosta (70')
- Carlos Pineda (75')
- Kervin Arriaga
- Ángel Tejeda (70')
- Brayan Moya (45')
- Banquillo
- Eddie Hernández (70')
- Najar (75')
- Alberth Elis (45')
- Edrick Menjívar
- Alexander López (45')
- Boniek
- Deybi Flores
- Johnny Leverón
- Luis Palma
- Rigoberto Rivas
- Marlon Licona
- Edwin Rodríguez (70')
