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LIGA MX

La historia del Ruso Zamogilny con el Pacto de Caballeros

Durante su época como futbolista, el hoy analista de TUDN vivió en carne propia la injusticia que significaba el acuerdo que tenían los dueños de los equipos del futbol

Ciudad de MéxicoActualizado a
La historia del Ruso Zamogilny con el Pacto de Caballeros
HECTOR CARBAJALMexsport

Durante más de una década, el Pacto de Caballeros fue la herramienta que los directivos del futbol mexicano utilizaron para controlar el mercado de fichajes y, de paso, proteger sus bolsillos.

En los libros, se cuenta que esta práctica ilegal encontró fin a mediados del 2018, cuando el entonces presidente de Liga MX, Enrique Bonilla, anunció modificaciones en el Reglamento de Transferencias que permitieran a los futbolistas en México contratarse con el equipo que quisieran sin la obligación de tener la anuencia de su club pasado.

Este jueves, la COFECE remató el tema imponiendo una millonaria sanción a 17 clubes, a la FMF y ocho personas físicas por aplicar el Pacto de Caballeros durante una década.

El argentino Damián Zamogilny fue de esos futbolistas que tuvo que lidiar contra la injusticia que significó ese pacto entre los dueños de equipos del futbol mexicano.

El hoy analista de TUDN, en entrevista con AS México, relató como Ricardo Henaine, ex propietario del Puebla, lo amenazó con aplicarle el Pacto de Caballeros cuando Damián buscaba firmar con los Tecos de la UAG.

"Me tocó en el 2018, previo a mi salida a Tecos, yo llegué a Puebla libre, con una carta de Real de la Plata, mi último club en Segunda División en 2002-2003, ellos me liberaron el pase y llegué al Puebla, firmé mi contrato por un año y lo renové por uno más al año, ya estábamos en Primera Divusión y yo tenía muchas ofertas para salir de otros clubes y esta condición de libertad, entre comillas, era atractiva para muchos clubes pero, al final de cuentas, no negociaron conmigo directamente, en aquél entones, Puebla recibió un pago por mi pase, aunque ya no tenía contrato", explicó.

El Ruso compartió que Henaine acababa de llegar como socio mayoritario al Puebla y cambió todas las condiciones que, previamente, ya había acordado con la directiva de La Franja.

"El dueño era Ricardo Henaine, que en ese torneo se sumó, yo tuve una plática directa con él, quería renovar con Puebla y yo ya tenía un acuerdo con la chiquillada, con los socios que se metieron en el momento del ascenso, estábamos en el estire y afloje ya, Henaine no le pareció lo que estaba yo pidiendo, obviamente, yo quería un buen contrato porque había llegado libre, no habían pagado nada por mí, entonces, en ese momento cuando se enteró de la negociación me enfrentó vía telefónica con ese tema del Pacto de Caballeros diciéndome que ya se había enterado de cómo funcionaban las cosas porque no era una persona de futbol y que iba a hacer que no pudiera jugar tratando de forzarme a renovar, incluso, ya tenía un acuerdo verbal con Tecos, me dieron la tranquilidad de que las cosas se iban a solucionar y eso me fortaleció para no tener una discusión más allá de esa", comentó.

FINAL FELIZ

Al final, la historia de Damián, por decirlo de alguna manera, tuvo un final feliz: pudo llegar a Tecos bajo las condiciones que pretendía, aunque eso no significó que Puebla no obtuviera ganancia del traspaso.

"Yo salí libre de Puebla, entre comillas, yo arreglé con Tecos, me dio lo que quería, yo les dije que yo llegaba en libertad de acción y que si había algún pacto ellos lo arreglaran directamente con Puebla, yo quería mi contrato y si me lo daban con mis condiciones económicas, yo firmaba, así lo arreglé yo. Me tocó un porcentaje en la Federación, supongo que esa transferencia se hizo, eso fue entre equipos", señaló.

Tiempo después, Zamogilny emigraría de Tecos al Atlas, y aunque tuvo temor de que viviera la misma experiencia que en Puebla, no fue así.

"Cuando me fui de Tecos ellos me firmaron la libertad y me aseguraron que no tendría ningún problema con mi transferencia al Atlas, hablé con el licenciado Antonio Leaño, firmamos una rescisión para poder ir al Atlas en condición de libre, tenía ese temor, no te voy a decir que no, por lo que viví en Puebla, que las cosas no se fueran a dar tan fluidamente, pero la gente de Tecos, la familia Leaño, respeto ese papel que firmó y se dio fácil mi traspaso", concluyó.