La importancia de la recirculación del aire acondicionado en el automóvil
Esta función no solo eleva el confort, sino también la salud de los pasajeros
Ya sea que haga frio o calor, el aire acondicionado del automóvil es un autentico salvavidas para los pasajeros debido a que permite controlar la temperatura del habitáculo.
De hecho, este elemento, que hace décadas era un lujo en los automóviles y que en la actualidad es básico, no solo es un elemento de confort, sino también de seguridad, ya que las temperaturas extremas -sobre todo el calor- afectan la concentración.
Está comprobando científicamente que, a más de 35º centígrados, el cerebro humano sufre efectos parecidos a los de conducir bajo la influencia del alcohol, aumentando el tiempo de reacción en más de un 20 por ciento.
Considerando lo anterior, es importante que el interior del automóvil esté perfectamente ventilado por medio del sistema de aire acondicionado.
Para sacar el mejor provecho de este, basta con ajustar la temperatura y saber en qué momento activar y desactivar la función de recirculación del aire.
¿Cómo funciona y para qué sirve la recirculación del aire acondicionado en los automóviles?
Cuando se activa el aire acondicionado, la calefacción o el ventilador del automóvil, el aire es absorbido del exterior y reconducido por filtros, al habitáculo.
Sin embargo, cuando se activa la recirculación, lo que se logra es que el acceso del aire exterior se cierre y el aire usado para la ventilación sea el existente en el habitáculo. Éste se reabsorberá y pasará de nuevo por el sistema y los filtros para volver a ser expulsado.
Con esta acción de “reciclar” el aire se logran una serie de beneficios, como evitar que el aire del exterior esté muy contaminado, huela mal, o tenga mucho polvo.
Al activar esta función se consigue un viaje mucho más cómodo y saludable, ya que los filtros pueden retener todas las partículas que no deseamos que lleguen a nuestros pulmones.
Además, ayuda a que el interior del automóvil se enfríe mucho más rápido, al no tener que ocupar aire más caliente del exterior y ponerlo a la temperatura indicada.
Asimismo, al utilizar aire cada vez más frío proveniente del interior del vehículo, no sólo la temperatura bajará más rápido, sino que, además, se consume menos energía y el aire acondicionado se forzará menos.
Eso sí, es importante tener en cuenta que el reciclaje del aire debe ser usado de manera puntual y sólo en casos como los que hemos mencionado antes, ya que el aire reciclado no sólo tiende a empañar los cristales, sino que, además, causa somnolencia, uno de los peores enemigos al volante.