Puebla derrota al Mazatlán FC y apunta al repechaje
La Franja supo levantarse para darle la vuelta al marcador y terminar venciendo 3-1 a los dirigidos por Tomás Boy en el estadio Cuauhtémoc.
Ya no hay dudas: ningún equipo de la Liga MX tiene hoy la capacidad de reacción que el Puebla de Nicolás Larcamón. Por segunda semana consecutiva, La Franja fue capaz de resurgir de sus cenizas, reeditarse y sacar un resultado de oro puro derrotando en casa 3-1 al Mazatlán.
Si en la jornada pasada los de la Angelópolis vinieron de atrás cuatro veces para remontar y conseguir un espectacular empate frente al Toluca, ahora, de nueva cuenta, supieron levantar la cara y, tras verse abajo en el marcador, hacer lo suyo para terminar apaciguando las aguas y derrotar al Mazatlán.
Hoy más que nunca la posibilidad de repesca para el Puebla es latente. Y, la verdad, es que juegan para merecerla y, ya ahí, cualquier cosa puede pasar con el equipo de Larcamón. Porque la Franja del Guardianes 2021 sí es mucha agalla, eso es verdad, pero también mucho futbol. Este equipo juega muy bien y lo hace con una limitada plantilla, lejana de las nóminas millonarias, pero eficaz como muy pocas en el actual torneo.
Mazatlán, quizá, hubiera merecido mejor suerte, pero los errores infantiles se pagan caro y Nico Vikonis cometió dos que terminaron por ser fundamentales en la derrota. El guardameta se ganó una primera amarilla en una jugada intrascendente, en donde salió de paseo y se obligó a una falta tonta.
Después, ya cuando el primer tiempo moría y su equipo ganaba, dio un puñetazo en el rostro a Escoto en una salida temeraria, de esas que van al bulto y no al balón, y se ganó la segunda amarilla, lo que provocó su expulsión y el penal que haría efectivo Ormeño para el empate.
Así, el gol del brasileño Giovani de Oliveira, que se concretó a los 16 minutos, sirvió de nada para los sinaloenses que tuvieron que remar contra la corriente toda la segunda mitad con un hombre menos.
La mesa estaba puesta para el Puebla y aunque Mazatlán intentó defenderse con lo que le quedó, como gato boca arriba, una raya fulminante salió de la pierna izquierda de Salvador Reyes, al minuto 63, para irse a meter al ángulo y poner el 2-1 a favor de los locales.
La cosa ya fue más sencilla para Larcamón y sus muchachos, un equipo que no deja de correr ni un minuto y que firmó la noche a los 71 minutos, con otro disparo desde fuera del área de Maximiliano Araujo para el 3-1.
El resto del encuentro fue mero trámite para confirmar que el Puebla, sí, el de la plantilla corta, pinta para ser el caballo negro de la competencia.