¿Por qué no arranca el motor del automóvil? Estas son las causas más comunes

Es común que cuando un automóvil no enciende, se sospeche en la batería, si bien esta puede ser una causa, existen otros factores que pueden paralizar el motor.

En caso que la planta de poder del vehículo no encienda, hay que tener en cuenta otros factores que suelen ser comunes cuando esta situación se hace presente.

Éstas son las causas más frecuentes que provocan que el motor no arranque:

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Una batería sin carga o débil ocupa un lugar destacado cuando se trata de problemas de arranque. Además del frío, numerosos consumidores eléctricos, como sensores, ventanillas traseras, limpiaparabrisas, ventiladores, etc., ejercen presión sobre la batería.

Esto también se aplica a las luces o la radio, especialmente si no se apagan automáticamente después de estacionar el automóvil. Este puede ser el caso de los automóviles más antiguos en particular.

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A menudo, el ruido que hace el motor de arranque al intentar arrancar indica que la batería se está debilitando. Si este es el caso, el motor de arranque funciona con lentitud o no puede encender el motor en absoluto.

Como regla general, la corriente en el interior también fluctúa (luces de señalización, luces) y, por lo general, aparece una advertencia en los vehículos modernos. En el peor de los casos, cuando se intenta arrancar el motor, solo escuchará un chasquido, activado por el interruptor magnético del motor de arranque.

Si queda descargada la batería, lo único que puede ayudar es pasarle corriente con otro automóvil, o bien cargar la batería con un cargador o reemplazar la batería vieja por una nueva.

Esto último solo debe hacerse si la batería vieja está realmente defectuosa. Un acumulador que simplemente está descargado no necesita ser reemplazado por una nuevo.

En vehículos con transmisión manual, esta situación se puede resolver empujando el vehículo para que arranque.

Si el alternador no funciona, la batería ya no se cargará mientras se conduce el automóvil. Por lo general, esto se hace visible mediante el símbolo de batería iluminado permanentemente en el tablero. Normalmente, este indicador se apaga inmediatamente después del inicio.

Básicamente, la electricidad se genera en el alternador (generador trifásico) durante la conducción, y se almacena temporalmente en la batería para luego estar disponible al arrancar y operar el vehículo.

En caso que el problema radique en el alternador, a veces, todo lo que necesita hacer es reemplazar la correa de transmisión del alternador.

¿La batería está llena, pero el automóvil sigue sin arrancar? Ocasionalmente, el circuito eléctrico se interrumpe por problemas con los cables de alimentación. Aquí las causas pueden ser diferentes:

Corrosión: En los automóviles, la carrocería de acero sirve como una línea "negativa". Es por eso que componentes como el alternador o la batería están conectados directamente a la carrocería.

Ante este escenario, el flujo de corriente puede interrumpirse en esta interfaz debido a la corrosión, lo que puede provocar problemas de arranque.

Cables sueltos: especialmente en vehículos más antiguos, las conexiones roscadas de los cables pueden soltarse, lo que interrumpe el flujo de corriente.

Mordedura de algún roedor: También existe la posibilidad que algún roedor muerda algún cable, lo que provoque problemas de encendido.

Mal funcionamiento en el sistema de combustible

En el caso de los vehículos con motores combustión, es posible que una falla en el sistema de combustible afecte el encendido del motor.

Si el tanque de combustible no está vacío, podría existir una obstrucción en el filtro de combustible o en la línea de combustible, una falla de la bomba de inyección y fallas en varios sensores. Entonces, por lo general, acudir al taller puede ser la solución.

En general, el diagnóstico remoto de problemas de puesta en marcha es casi imposible, porque puede haber muchas otras causas además de las mencionadas.

En vehículos más antiguos, en particular, las piezas de desgaste defectuosas, por ejemplo, arrancadores o bujías defectuosas, pueden dificultar o incluso imposibilitar el arranque.