Auditoría revela nuevas irregularidades en la Conade
El Órgano Interno de Control de la Conade encontró cinco irregularidades en el control de los recursos de la Subdirección de Calidad para el Deporte en el segundo semestre de 2019.
Los resultados de la última auditoría realizada por el Órgano Interno de Control de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) a la Subdirección de Calidad del Deporte del mismo organismo revelaron cinco nuevas irregularidades en la gestión de recursos públicos, incluidos los del ya desaparecido Fondo de Alto Rendimiento (Fodepar). La auditoría referida, con número 02/2020 y clave 11139, fiscalizó el ejercicio de la Subdirección durante el último semestre de 2019.
En el informe de los resultados de la auditoría, revisado por AS y fechado el 30 de septiembre de 2020, el Órgano Interno de Control detalla cinco anomalías: deficiencias en la normatividad del Fodepar; irregularidades en la contratación de personas conforme al Capítulo 3000 (una partida especial para contratar servicios por honorarios); 'analistas técnicos' que recibían ingresos del Fodepar sin acreditar los requisitos para ello; recurrencia en irregularidades en el otorgamiento, aplicación y comprobación de recursos por concepto de apoyos económicos a entrenadores del Fodepar; y anormalidades en la comprobación de recursos de federaciones deportivas. Proceso estima que dichas observaciones supondrían un daño de 100 millones de pesos al erario público.
El director del Órgano Interno de Control de la Conade, Filiberto Otero, fijó como plazo máximo el 4 de diciembre para que la Subdirección de Calidad para el Deporte, bajo el cargo de Óscar Arturo Juanz Roussell, implemente las medidas correctivas para solventar las irregularidades. Juanz Roussell firmó el acuse de recibo el 30 de septiembre de 2020 y el informe fue validado un mes exacto después. El reporte del OIC también está dirigido a la directora de la Conade, Ana Gabriela Guevara. Solo son públicos los resultados finales de la auditoría, que constan de tres páginas, y no los documentos de la misma.
El 27 de septiembre de 2019, el OIC giró el informe de la auditoría pertinente al primer semestre de 2019, de la que se desprendieron ocho observaciones traducidas en un perjuicio de 50.8 millones de pesos. Aquel reporte fue recibido por el entonces Subdirector de Calidad del Deporte, Israel Benítez. En febrero de 2020, la Secretaría de la Función Pública anunció una investigación para conferir responsabilidades administrativas. El proceso finalizó cinco meses después, en julio, cuando la SFP inhabilitó de sus funciones a Arturo Contreras, director de Alto Rendimiento, y destituyó a Benítez. Sin embargo, hasta ahora, no existe ningún procedimiento judicial en contra de algún funcionario.